Ejercicio pliométrico y terapia exprés: los bunny hops activan fuerza, equilibrio y energía. FOTO: Pexels.
Pocos ejercicios logran tanto
Qué son los bunny hops y por qué este salto puede transformar tu forma física en tiempo exprés
No necesitas gimnasio, ni pesas, ni mucho tiempo. Solo tus piernas y algo de energía: los 'bunny hops' tonifican, queman y hasta mejoran el ánimo
Por Marcos López
12 DE OCTUBRE DE 2025 / 08:00
Hacer ejercicio nunca tiene que ser una tortura. Siempre puedes saltar en una cama elástica y ponerte en forma mientras te diviertes. Y si estás dispuesto a sacrificar un poco de disfrute para subir la intensidad de tu entrenamiento, ha llegado el momento de volver a hacer el animal y llevar estos saltos un poco más allá. De ponerse a brincar como un conejo. Porque sí, el “bunny hop” puede ser ese ejercicio para fortalecer piernas en casa que te devuelve el buen humor mientras sudas.
Qué son los bunny hops, el mejor ejercicio para fortalecer piernas en casa
Javier Giménez, entrenador personal y CEO de Healthy Fitness, explica que «los saltos de conejo o bunny hops son un ejercicio pliométrico en el que, imitando el movimiento característico de un conejo brincando, se realizan saltos consecutivos hacia adelante con ambos pies juntos. Se inicia en posición semiflexionada, se flexionan rodillas y caderas mientras los brazos van hacia atrás, y se realiza un salto explosivo hacia adelante balanceando los brazos».
¿Ya has despegado? Pues ahora toca posarse en el suelo mientras vuelves a coger impulso. O como indica el experto, «el aterrizaje se realiza con ambos pies simultáneamente, absorbiendo el impacto con flexión de las rodillas para encadenar inmediatamente el siguiente salto».
Más fuerte, más rápido y más alto (aunque saltes como un conejo)
Da igual que la imitación no sea perfecta y, a diferencia de los brincos conejiles, no utilices las cuatro extremidades. Lo realmente importante son los beneficios. Comenzando, destaca Javier Giménez, «por un desarrollo de la fuerza explosiva, pues mejora la capacidad de generar fuerza rápida en el tren inferior; y un fortalecimiento de las piernas, siendo el trabajo especialmente intenso en los cuádriceps, glúteos y gemelos».
Pero aún hay más. Este ejercicio también promueve la coordinación bilateral, potenciando la sincronización entre ambas piernas; aumenta la capacidad cardiovascular, pues se asocia a una alta demanda energética; y mejora el equilibrio dinámico al requerir un control postural tanto en los saltos como en los aterrizajes.
Asimismo, continúa el entrenador personal, «los bunny hops también potencian la agilidad y la rapidez, fundamentales para deportes con cambios de dirección; y aumentan la densidad de los huesos. De hecho, el impacto controlado estimula la salud ósea».
Cuidado con dónde (y cómo) aterrizas
Es un ejercicio sencillo, pero hay que tener cuidado de ejecutarlo correctamente. Evitar los errores —muy comunes— que contrarresten sus beneficios. O peor aún, que te causen una lesión. Puede ocurrir si tu aterrizaje es demasiado rígido, no flexionas las rodillas para absorber el impacto o pierdes la sincronización entre ambos pies al volver a la tierra.
También es importante que las rodillas no colapsen hacia dentro al contactar con el suelo; que se utilice el balanceo de los brazos para potenciar el salto —a mayor impulso, mayor beneficio—; y que se mantenga una cadencia adecuada sin perder el ritmo continuo entre los saltos.
Un último error, el más importante para no jugarte las rodillas: evitar, como alerta Javier Giménez, «realizar el ejercicio en una superficie inadecuada, caso de los suelos duros o resbaladizos».
No hace falta ser atleta para brincar
Así que ya sabes cómo disfrutar de los saltos de conejo y sus beneficios. Pero, ¿realmente es un ejercicio para ti? El entrenador personal destaca que se trata de un movimiento excelente para el desarrollo motor y la diversión en niños y adolescentes, así como muy recomendable para adultos jóvenes activos con buena condición física, e incluso como entrenamiento de potencia para deportistas.
Tampoco pasa nada si ya has entrado en la mediana edad y en tu currículum no figuran varias maratones. En el caso de los principiantes es «más que recomendable una progresión previa con ejercicios de menor impacto». Si no puedes esperar a ponerte a brincar, siempre puedes empezar con saltos más pequeños, reduciendo distancia e intensidad; usar una superficie blanda como una colchoneta; espaciar los descansos; y sacrificar la altura por la distancia, es decir, saltar más horizontal que verticalmente.
En resumen: pocos movimientos tan simples logran tanto. Este ejercicio para fortalecer piernas en casa activa músculos, mejora el equilibrio y, de paso, sube el ánimo.
No todos los cuerpos están hechos para saltar
Por el contrario, este ejercicio de impacto moderado-alto no resulta muy aconsejable para personas mayores o con sobrepeso, ya que puede suponer una sobrecarga articular excesiva. Y en la misma línea, estaría contraindicado —además de durante el embarazo— en «personas con problemas de rodilla o tobillo, con lesiones de ligamentos, con osteoporosis, con problemas cardiovasculares graves o con cirugías recientes de extremidades inferiores», concluye Javier Giménez.
Si este no es tu caso… ¿por qué no darle una oportunidad?