Naomi Campbell: genética de diosa, rutina de humana

Una cosa es haber sido tocada por la varita mágica de la genética y otra no poder de tu parte. Para ejemplo, Naomi Campbell. Es indudable que su imponente físico tiene a la naturaleza de su lado (basta con echar un vistazo a su madre para verlo), pero en su cuenta de Instagram muestra día a día la exigente rutina de ejercicios que se ha impuesto últimamente para llevar una vida sana. Vamos, que la británica no solo confía en sus genes, también modela su silueta a golpe de esfuerzo y sudor.

Atrás quedan episodios rocambolescos que la coronaron como la top model con más malas pulgas de los 90. Una carácter que, todo sea dicho, hacía las delicias de la prensa sensacionalista. Que lo mismo agredía a su asistente personal (Georgina Galanis era su nombre) que le lanzaba una BlackBerry a una empleada doméstica (para centennials, era el móvil tope de gama en tiempos en que el Nokia 3310 era lo habitual). La musa de las pasarelas llego incluso a agredir a dos policías en Heathrow cuando el enfado resultante de haber perdido sus maletas se le fue de las manos. Todo aquello es agua pasada y  hoy solo muestra su lado más amable y saludable.

Al avión, con un ‘tupper’ de casa

La supermodelo, que ingresó en un centro de rehabilitación en 1999, asegura no echar de menos el alcohol. «La adicción es una mierda. Crees que va a sanar tus heridas, pero no es así”, aseguró en  la docuserie de Apple TV The Supermodels. “Siempre asumí mis errores y elegí ir a rehabilitación. Fue lo mejor y lo único que pude hacer por mí en ese momento”, sentenció.

De la mano del coach de bienestar Irvaan Dolley y del entrenador Warren Whitely entrena a diario y alterna sus sesiones con entrenamientos con chalecos de electroestimulación. Este verano estuvo en Brasil entrenando con el trainer Rafael Ferreira, con quien alternó divertidas sesiones de danza con otras de Pilates en máquina. El chef personal de Naomi Campbell, Sean John, ha explicado que la modelo es «básicamente vegetariana. O, mejor dicho, pescetariana». Dos opciones de muchos quienes siguen una vida sana. «Le preparo una comida deliciosa al día, súper limpia y muy saludable. Cuando viaja también le preparo la comida porque ella no come comida de avión», explicó a Page Six. En el fondo la modelo es como cualquiera de nosotros cuando salimos de casa de la abuela con un tupper lleno de croquetas caseras, pero más refinado. 

El momento Arguiñano, rico, rico

Como todo los chefs, Sean John tiene claro que para que sus platos sean apetecibles y sus clientes estén felices con sus servicios, los menús tienen que proporcionar un deleite a las papilas gustativas. «Lo que ella come tiene que tener sabor. No puedes simplemente ponerle sal y pimienta. Tiene que haber especias y hierbas. Le encanta que su comida sea sabrosa», aseguró. A ella y a todos los demás, querido John.

Además de poner perejil, albahaca o lo que sea que le gusta a sus platos, dentro de su estrategia de vida sana, Naomi Campbell solo come una vez al día y ha asegurado que le encanta hacer la compra ella misma. «Necesito hacer mis propias compras, no puedo pedirlas en línea. Comprar es terapéutico», dice en un vídeo publicado en su perfil de YouTube grabado en el supermercado Whole Foods, donde compró peras, limones, uvas, melocotones, albahaca fresca, yogures con sabor a frutas y pasas.

A sus 55 años, Naomi Campbell ha demostrado que dar un giro hacia la vida sana es posible. Viendo sus imágenes, no cabe duda de que da resultados. Lo sabemos: no todo son los genes pero no neguemos que los suyos son algo privilegiados… ¿Habla la envidia? Mejor no responder a esto.