Soy licenciado en Ciencias Biológicas. Pero el destino me empujó, hace más de 25 años, a colgar la bata, guardar el microscopio y dar el salto al periodismo especializado en temas de salud. Una labor que se ha convertido en toda una pasión y que trato de compaginar, sin mucho éxito, con breves momentos para alimentarme y dormir.
Aprendiendo de los animales
Parece un juego infantil, pero es un entrenamiento funcional que mejora fuerza, postura y coordinación. Y sí, te deja sin aliento
Pocos ejercicios logran tanto
No necesitas gimnasio, ni pesas, ni mucho tiempo. Solo tus piernas y algo de energía: los 'bunny hops' tonifican, queman y hasta mejoran el ánimo
compras, ¿luego existes?
Mirar una y otra vez en tu móvil en busca de gangas que no necesitas sólo te genera ansiedad. Y una vez encontrada, la felicidad inicial puede tornarse en culpabilidad
Crónica de un bajón anunciado
Los lunes son el villano favorito, pero la ciencia lo desmiente: el cuerpo reacciona a cualquier arranque laboral, con más cortisol y, sí, más infartos
la ciencia de la alegría
La Universidad de la Columbia Británica resume en seis hábitos, de la gratitud al descanso digital, las claves que elevan la felicidad y alargan la vida
del patio del cole al 'open space'
Ni silencio ni bronca con insultos: la asertividad es la vía para frenar el acoso laboral, marcar límites claros y recuperar tu espacio con autoridad
Amor con posverdad
Ni drama ni culebrón: a veces las parejas no se rompen de un portazo, sino a golpe de pequeñas mentiras que, sin ruido, van agujereando la confianza
Hazte escuchar
¿Tu jefe, pareja o amigos desconectan a la tercera frase? Tácticas infalibles para recuperar su atención
¿Hablas entredientes?
Halitosis traicionera: esa invitada que aparece cuando menos lo esperas y no entiende de rutinas, ni de colutorios, ni de citas importantes
Bocados de ansiedad
Ansiedad, dientes rebeldes o prisas al comer: mil excusas para acabar con las mejillas en carne viva. Por qué te muerdes la mejilla por dentro y cómo frenar esos mordiscos que se repiten sin querer
¿Sin cepillo no hay beso?
Lengua de lija, labios cuarteados y cero glamour. La boca polvorón –seca– tiene culpables claros y gestos simples para que amanezcas con aliento fresco. Así se arregla
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