Algunos aceites esenciales ayudan a disminuir el estrés y aumentar la melatonina. FOTO: Freepik.
SUEÑO
Dormir mejor en verano: los aceites esenciales que pueden ayudar a relajar y a conciliar el sueño
Al ayudar a disminuir el estrés y aumentar la melatonina, sus efectos pueden promover el sueño y un descanso de mejor calidad.
Por Paka Díaz
27 DE JULIO DE 2025 / 08:00
Con la llegada del verano, el calor nocturno muchas veces se lleva el sueño. Descansar se hace más complicado. Por eso, aparte de poner la temperatura adecuada del dormitorio, se buscan ayudas complementarias. Algunos aceites esenciales pueden contribuir a fomentar el descanso.
Hay que tener en cuenta que, como advierte Enrique Sanz Bascuñana, aromatólogo y maestro artesano perfumista «no todos los aceites funcionan igual para todo el mundo». El autor de Aromaterapia para dummies (Ed. Hoepli Ediciones) explica que «nuestro sentido del olfato está directamente enlazado con el sistema límbico, la sede primaria de emociones y memorias. Ese vínculo se aprovecha a través de la psicoaromaterapia, que utiliza aceites esenciales como llaves rápidas y potentes para desencadenar respuestas emocionales y físicas que favorecen el descanso».
Por qué los aromas ayudan a dormir
Ciertos aceites esenciales pueden ayudar a modular el sistema nervioso, la respiración y las hormonas asociadas al sueño, para preparar el organismo para el descanso. Sanz Bascuñana explica que «actúan elevando neurotransmisores inhibitorios, como GABA, glicina y serotonina, que facilitan el sueño. Tratamientos con lavanda han demostrado aumentar niveles sanguíneos de melatonina, reducen estrés y equilibran el sistema simpático‑parasimpático».
Diversas investigaciones lo confirman. Un ensayo publicado en Journal of Alternative and Complementary Medicine con adultos que inhalaron aceite esencial de lavanda durante cuatro semanas, mostró un aumento significativo de melatonina. Eso favorece el ciclo sueño y vigilia.
En otro estudio de la Facultad de Medicina de Showa en Tokio, se pulverizó lavanda tras dormir unos 90 minutos. Al analizar saliva se observó que marcadores del estrés como la amilasa y la cromogranina A, disminuyeron significativamente. Esa reducción del estrés tiene repercusiones directas en la calidad del descanso.
Aceites para mejorar el sueño
Para Sanz Bascuñana, aunque el de lavanda es el rey de los aceites esenciales para promover el descanso, hay varios recomendables. Porque lo que considera importante es personalizar la elección, ya que en aromaterapia es fundamental que te guste el aroma con el que vas a trabajar. «Hay aceites clásicos para promover el sueño, como lavanda, mejorana dulce, mandarina y naranja. Lo importante es que la persona se sienta bien con ese aroma antes de dormir», señala el experto. Porque, recuerda que «a un 30 % de la población la lavanda, por ejemplo, les resulta desagradable».
Entre los aceites esenciales que recomienda el perfumista destaca de la flor del naranjo amargo, el de azahar o neroli, sugerido en casos de insomnio ligado a ansiedad. «Puede funcionar bien en muchas personas, pero no en todas. Es clave testar individualmente», comenta. Gracias a los estudios científicos, otras esencias están emergiendo como aliados del descanso. Por ejemplo, bergamota, manzanilla, cedro y ylang‑ylang, por su efecto sedante o reducir cortisol.
Cómo usar los aceites esenciales
Para que los aceites esenciales puedan ser efectivos es crucial hacer un uso adecuado de ellos. Lo primero es elegir el más indicado para ti. El aromatólogo recomienda hacer una prueba en una tira de papel o absorbente: «Si te relaja, es buena señal». En principio, el método más accesible es el difusor en el dormitorio. Enrique Sanz Bascuñana aconseja encenderlo unos 45 minutos antes de acostarse y luego apagarlo. «Así aromatizamos el ambiente, pero sin saturarlo», afirma.
Para quienes tienen formación más avanzada en aromaterapia, el experto recomienda combinar varios métodos. Además de por vía olfativa a través de los difusores y los baños aromáticos, que relajan cuerpo y mente, propone por vía tópica. Se hace con masajes con aceite vehicular, o sea, aceites conductores, sin aroma o casi sin él, como el de almendra, en el cual se ponen unas gotas de aceite esencial. Al masajear, «se libera tensión muscular y el automasaje es excelente para relajar la musculatura», recuerda Sanz Bascuñana.
Precauciones indispensables
«Natural no es sinónimo de seguro», advierte Sanz Bascuñana. El experto explica que los aceites esenciales «son tan eficaces, entre otras cosas, porque tienen una composición química muy potente, aunque sea natural. Esto implica un riesgo si se usan mal».
En uso externo pueden ser irritantes, producir quemaduras, manchas y alergias. En interno, incluso toxicidad muy grave. «Antes de usarlos, hay que saber para qué sirven, sus contraindicaciones, si realmente los necesitamos y aplicarlos con seguridad. Y, en caso de embarazo, niños, o alguna patologías, consultarlo con un profesional.», recomienda.