BELLEZA
Drena tu rostro en 5 minutos: el masaje que reduce líquidos y afina el contorno
Deshincha, tonifica y redefine: así es el masaje que drena tu rostro y que puedes hacer en cabina y en casa.
Por Silvia Capafons
11 DE JULIO DE 2025 / 14:02
¿Cuántas veces te has levantado con el rostro hinchado y las bolsas bajo los ojos bien marcadas? Probablemente más de las que recuerdes. Pero no es solo cuestión de retener líquidos durante la noche o haber dormido poco. También puede tener su origen en la toma de algún medicamento, en un tema hormonal, en el estrés, el alcohol y el tabaco, en comer con demasiada sal o en cenar tarde y de manera copiosa.
Es entonces cuando el organismo no da abasto para filtrar y depurar y se inflama. Así lo explica la experta en estética antiaging Carmen Fernández Ruiz: «Si hablamos del rostro, las toxinas suelen acumularse en forma de bolsas o en toda la cara y es importantísimo drenarlo para que la piel esté bien irrigada de flujo sanguíneo, y así, se defienda bien. De ahí la importancia de drenar el rostro».
«Para ello tengo que remitirme a la linfa, que es el líquido corporal que baña todas las células y del cual comen todos los organismos intercelulares, pero a su vez todas las toxinas van a él, por lo que cuando tenemos una inflamación en cualquier parte del cuerpo, sea la cara, las piernas, etcétera, se debe a que hay un estancamiento de las mismas, aumentado por una retención hídrica que produce dicha inflamación. Al drenar el rostro lo que hacemos es eliminar el líquido sobrante y estancado, donde están las toxinas de todo lo que el cuerpo desecha». apunta la experta.
Ganglios linfáticos, las depuradoras
Así pueden definirse los ganglios linfáticos, como grandes depuradoras del organismo, que por un lado realizan una labor de limpieza y por otro filtran todas las toxinas del organismo, que luego se eliminan a través de la orina y las heces.
De ahí que el masaje drenante, sea facial o corporal, beneficie a cualquiera, como cuenta Carmen Fernández. Sea mediante maniobras manuales o acompañadas de utensilios de masaje facial como pueda ser un rodillo de jade, un guasha o una maderoterapia, descongestionan el flujo sanguíneo para que los ganglios sean capaces de depurar la linfa y drenar los líquidos que han quedado retenidos, además de tonificar, redefinir y estimular la síntesis de colágeno y elastina, y por tanto mejorar la elasticidad y combatir la flacidez.
Además, hay condiciones especiales, como un embarazo o una intervención quirúrgica, que pueden causar edema y perjudicar el funcionamiento del sistema linfático, lo que hace aún más recomendable el drenaje facial.
La técnica exprés para drenar tu rostro en 5 minutos
«El tratamiento consiste en hacer un tipo de masaje de drenaje con una técnica universal, inventada por el Doctor Vodder en 1930, donde primero se vacían los ganglios linfáticos y después se drena, mediante un masaje muy suave, como si fueran olas hacia esos ganglios linfáticos para que todo el líquido corporal entre por ahí y se depure».
Y sí, puedes drenar tu rostro en 5 minutos: aunque para que la técnica sea efectiva lo suyo que este tipo de maniobras las haga un profesional con conocimiento de los puntos a estimular y la dirección, también podemos realizarnos un automasaje básico desde casa, teniendo en cuenta, lógicamente, las limitaciones en cuanto a los resultados.
«En ese tiempo se pueden drenar una bolsa bajo los ojos o alguna zona pequeña. Para un masaje linfático efectivo y general, lo ideal es alargarse un poco más. Hacerlo más lento y pausado», añade la experta. En cuanto a la frecuencia, dependerá de la acumulación de líquidos, que serán mínimos en caso de quien haga mucho deporte, coma muy bien y lleve una vida saludable. «En general, lo ideal es hacerlo una vez a la semana», añade Carmen Fernández. Después del mismo es importante tomar mucha agua para ayudar al organismo a desechar las impurezas.
Tips para drenar tu rostro en casa
La experta en estética antiaging ofrece unos pasos básicos para un drenaje linfático facial.
- La premisa básica es acordarse siempre que cualquier movimiento debe llevar la linfa hacia los ganglios.
- Se pueden usar los dedos o las yemas de los dedos, aplicando una ligera presión y movimientos suaves. Se suele hacer con una crema ligera para facilitar el desplazamiento.
- Comienza desde el centro de la frente y mueve los dedos hacia las sienes. Después, ve hacia abajo por los costados de la cara hasta llegar a la zona de la mandíbula.
- En la zona del contorno de ojos, realiza movimientos suaves y circulares desde el interior hacia el exterior, siguiendo la línea del contorno ocular.
- En la zona de las mejillas desliza los dedos desde la nariz hacia las sienes y luego hacia la zona preauricular.
- Y en la mandíbula masajea suavemente desde el centro de la barbilla hacia las orejas y luego hacia la zona preauricular.
- Por último, en el cuello realiza movimientos suaves hacia abajo, desde la mandíbula hasta la clavícula.