El perfume inspirado en la naturaleza de Issey Miyake cumple 30 años

«La naturaleza es el mejor perfumista, todo lo que tienes que hacer es inspirarte en ella». Esta declaración corresponde al diseñador japonés Issey Miyake (Hiroshima, 1938-Tokio, 2022), quien siguió a pies juntillas su propia máxima para dar a luz uno de los perfumes más revolucionarios de todos los tiempos: ‘L’Eau d’Issey’. Esa fragancia cumple ahora 30 años, un aniversario que coincide con el de otro aroma emblemático, ‘Angel’, de Thierry Mugler. En el caso de Miyake, la marca ha querido celebrar este cumpleaños de una manera especial: ha encargado a la artista francesa Elisa Valenzuela y al creador brasileño Luiz Zerbini que reinterpreten el universo de ‘L’Eau d’Issey’.

Pero, ¿cuál es la historia que hay detrás de este perfume? Retrocedamos a 1992. Por aquel entonces, hombres y mujeres se rendían a los encantos de los intensos aromas orientales. Hasta que llegó Issey Miyake y rompió la baraja: él quería comercializar bajo su nombre un perfume que oliera a una gota de agua. Imaginamos que su entorno se echó las manos a la cabeza al escuchar su idea supuestamente peregrina (¿a qué diantres huele una gota de agua?). Sin embargo, el perfumista Jacques Cavallier fue capaz de crear exactamente lo que Miyake quería: mezcló calone (una molécula de síntesis que evoca las notas de la brisa marina), maderas, rosa búlgara, loto, gardenia… y voilà! nació ‘L’Eau d’Issey’.

El frasco de esta fragancia también merece una explicación. En vez de tratarse de uno de esos envases recargados tan a la moda en los años 90, Miyake optó por un sencillo frasco de cristal con un tapón coronado por una esfera. Dicho frasco no es del todo recto, ya que sigue los principios del wabi sabi japonés, según el cual la perfección nace de la imperfección. Hoy en día, este packaging se fabrica bajo el cumplimiento de los requisitos de sostenibilidad de la marca:  «Issey Miyake Parfums hace posible el cambio positivo reduciendo el impacto medioambiental durante el diseño de sus productos, aseguran sus responsables.

Hoy, ‘L’Eau d’Issey’ se mantiene como uno de los perfumes más vendidos. Si, como a Miyake, te apasiona la naturaleza, este podría ser un buen auto-regalo para las próximas Navidades.