Los beneficios de la manzanilla: calmante, te ayuda a dormir mejor y es perfecta para las digestiones

Siempre se ha hablado del poder de la manzanilla para el bienestar digestivo, de hecho, que levante la mano quien no se tome esta infusión ante cualquier dolor de estómago o sensación de náuseas. Así, se ha ganado a pulso convertirse en la número 1 de las infusiones consumidas en el hogar.

«Según El Ministerio de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (Mapama), la manzanilla es el producto más popular, representando más del 11,2% del volumen de venta de infusiones y tés en España, mientras que el poleo menta, la segunda infusión más demandada, representa alrededor del 4,5% del total de las ventas», dice la farmacéutica Luz García Toro.

¿Qué tiene la manzanilla de especial?

Lo que le hace distinta a otras infusiones, y lo que le permite a su vez estar cargada de propiedades beneficiosas para cualquiera, es la presencia, entre otros, de un poderoso flavonoide, la apigenina. A través de ella, se desencadenan una serie de efectos buenos y diversos.

1. Reduce la inflamación abdominal

No cabe duda de que nuestras abuelas tenían razón cuando nos aconsejaban tomar una manzanilla ante cualquier molestia de estómago. Además, se habla con rigor de su poder para aliviar la inflamación abdominal, por sus propiedades carminativas, reduciendo los gases y la hinchazón: «El efecto beneficioso para las molestias abdominales se explica por su contenido en apigenina y, aunque en menor grado, otros flavonoides. Estos activos naturales poseen acción espasmolítica, lo que quiere decir que relajan la musculatura y por ello favorecen el bienestar intestinal», asegura la farmacéutica Luz García Toro.

La efectividad reduciendo los cólicos menstruales e intestinales, es real, y el contenido en apigenina en el caso de la manzanilla es en proporción mayor que en otros alimentos que también lo tienen, como el apio y el perejil, por ejemplo.

2. Tiene propiedades antioxidantes

Esta es la razón por la que se recomienda su uso tópico. La apigenina vuelve a ser la responsable de que tenga poderes curativos en la piel. «Las afecciones de la piel pueden mejorar gracias a ella, entre otras cosas, porque alivia la irritación e inflamación». Si tienes bolsas, prueba a ponerte saquitos de manzanilla tibios durante 15 minutos en los ojos y descubre su resultado.

3. Efecto sedante

Se habla también de su capacidad para relajar y mejorar la ansiedad, recomendando su ingesta 45 minutos antes de ir a la cama. «Hay algún estudio que ha demostrado su efecto positivo para la ansiedad y el insomnio, no obstante, este uso no está reconocido por la EMA (Agencia Europea del Medicamento). Recordemos también que tomar una infusión caliente nos aporta sensaciones placenteras que nos ayudan a relajarnos y facilitar la conciliación del sueño».

Así, aunque no se le resta credibilidad a la propiedad relajante de la manzanilla, no perdamos de vista que esto es algo bastante común cuando hablamos de infusiones y que otras muchas, como la tila o la valeriana, melisa y pasiflora, también gozan de esta capacidad. ¿Y por qué hay quienes señalan los efectos sedantes de la manzanilla concretamente? De nuevo, la apigenina, al entrar en contacto con los receptores gaba del cerebro, causan somnolencia.

4. Diferencias entre las propiedades de la manzanilla, la menta y el jengibre

No exactamente. La manzanilla, como hemos dicho anteriormente, «favorece la relajación muscular y por ello alivia los gases, la hinchazón y mejora la digestión. Estas propiedades las comparte también con la menta, sin embargo, el efecto del jengibre es antiemético, es decir, preventivo del vómito y las náuseas», añade García Toro.