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La ONU estima que pasaremos de 1.400 millones de llegadas internacionales en 2019 a 1.800 millones en 2030. Si todas esas personas vienen en avión, piden Uber y se alojan en hoteles sin sello verde, el futuro huele a keroseno y a minibar. Foto: Unsplash

SOSTENIBILIDAD

Del turismo «todo incluido» al «todo consciente»: el modelo danés que premia tus buenas acciones

Spoiler: la caipiriña sigue existiendo, pero ahora te la ganas reciclando.

Por Equipo Welife

07 DE JULIO DE 2025 / 14:02

Primero fue la pulserita. Todo incluido, todo pagado, todo a pedir de boca. En los años dorados del turismo de resort, lo más cerca que estabas de una decisión consciente era si tomar el postre a las 12:30 o esperar al segundo turno del bufé.

Pero el planeta no da para tanto cóctel. Ni para tantos vuelos low cost. Así que algunas ciudades han decidido cambiar las reglas del juego. Copenhague, sin ir más lejos, acaba de estrenar una nueva edición de CopenPay, un programa que convierte tus buenas acciones en la ciudad en moneda de cambio. Si te portas bien (¿no deberíamos hacerlo todos?), te dan cosas.

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El sistema es sencillo: llegas a la ciudad en tren (emitiendo menos CO₂ que volando) y, a cambio, puedes conseguir desde alquileres de bicicleta gratuitos hasta sesiones de yoga o entradas con descuento en lugares como el Museo Nacional o la Galería de Arte de Dinamarca. ¿Te quedas más de cuatro días? Premio. ¿Recoges basura? Premio. ¿Comes vegetal? Premio.

Lo llaman turismo regenerativo, que no es que vengas tú a salvar el mundo, pero al menos no lo empeoras.

La iniciativa es de Wonderful Copenhagen, la oficina oficial de turismo de la ciudad, y este año ha triplicado su tamaño: pasa de 4 a 9 semanas y cuenta con 90 atracciones participantes. Entre ellas, sitios tan instagrameables como CopenHill, la pista de esquí sobre una planta de reciclaje, o GoBoat, para surcar los canales sin remordimientos (ni motor).

¿Recuerdas ese viaje en el que no viste la ciudad, pero sí todas las tiendas del duty free? Bien, pues ese modelo tiene fecha de caducidad. Copenhague no busca más turistas, sino mejores turistas. Visitantes que lleguen con la intención de quedarse más tiempo y moverse mejor. Porque, como dice su CEO, Søren Tegen Pedersen, «el mayor impacto climático del turismo proviene del transporte». Y no, no se refiere al patinete eléctrico.

La cosa va en serio: la ONU estima que pasaremos de 1.400 millones de llegadas internacionales en 2019 a 1.800 millones en 2030. Si todas esas personas vienen en avión, piden Uber y se alojan en hoteles sin sello verde, el futuro huele a keroseno y a minibar.

Lo mejor de CopenPay es que no funciona por obligación moral, sino por estímulo positivo. ¿Quieres comer una hamburguesa de garbanzo? Te invitamos. ¿Prefieres alquilar una bici en vez de subirte a un bus turístico? Gratis. ¿Recoges residuos en un parque? Pues hala, entrada al castillo de Kronborg, donde Shakespeare mató a Hamlet.

Y no es solo cosa de guiris. La iniciativa también está abierta a los locales. Porque, en palabras del propio Pedersen, «el turismo debe pasar de ser una carga ambiental a una fuerza para el cambio positivo». Lo que viene siendo: el turismo del futuro no será el que deja huella, sino el que la borra.

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Más allá del diseño nórdico, la bicicleta omnipresente y los museos donde hasta las salas huelen a madera ecológica, Copenhague está liderando un movimiento global. Desde su lanzamiento en 2023, más de 100 destinos han pedido asesoramiento para replicar la experiencia. Y lo han incluido como modelo en el programa de la UE Camino de transición para el turismo.

Por supuesto, no todo el mundo puede llegar a Copenhague en tren. Pero el mensaje es claro: cada viaje tiene un coste. Y no hablamos solo de la tarjeta de crédito.

Nadie te dice que dejes de viajar. Pero sí que lo pienses dos veces. Que si vas a hacer una escapada, intentes que el trayecto no emita como un coche durante un año. Que si puedes elegir, optes por quedarte más tiempo, en lugar de hacer turismo exprés con bandeja de plástico. Y que sepas que en Copenhague, si haces todo eso, te lo agradecen con yoga.