¿Kombucha para la piel? Estos son los increíbles beneficios de la kombucha que no se bebe

Sabemos que mantener una microbiota sana es un paso importantísimo para lograr una vida mucho más saludable, y que tomar alimentos probióticos es mucho más que una moda. Cuidar de nuestra flora bacteriana nos garantiza un sistema inmunitario fortalecido, una mejor síntesis de vitaminas y hormonas, una mejora del tracto digestivo y una protección extra frente a los patógenos. La kombucha es una de las bebidas healthy de moda que, entre sus múltiples beneficios, contribuye a equilibrar la flora intestinal. ¿Sabías que no solo se bebe? Te contamos todo lo que puede hacer la kombucha por tu piel.

SUSCRÍBETE a nuestra newsletter y recibe todas nuestras novedades para tu cuidado y bienestar.

¿Qué es la kombucha?

El boom de la kombucha llegó hace relativamente poco tiempo. Podemos encontrarla envasada en supermercados, consumirla en restaurantes e incluso hacerla nosotros mismos en casa. Anabel Zaldívar, cofundadora de Gloü Organics nos explica que “la kombucha es una bebida milenaria, de origen chino y con un alto contenido en probióticos que, hace unos años, se volvió a popularizar en Estados Unidos y Australia y poco a poco se ha ido extendiendo su éxito por el mundo”.

A día de hoy podemos encontrarla muy fácilmente y consumirla en distintas versiones. Con frutos rojos, jengibre, limón, cúrcuma, zanahoria… ya sea comprada o fermentada en nuestra casa.

Es un ingrediente sobre el que se habla y sobre el que se lee mucho, todo healthy lover ha probado la kombucha, la consume o la fermenta. ¿Qué es realmente la kombucha? “La kombucha es el producto de la fermentación del té, por la acción de bacterias y levaduras simbióticas”, afirma Zaldívar. Es decir, alimentamos nuestro hongo de kombucha (o scoby) con agua, té y azúcar. Dejamos fermentar y el resultado es una bebida muy saludable.

Este fermentado es un cóctel repleto de beneficios. Es rico en ácidos, enzimas y proteínas. También es fuente de vitaminas del grupo B (B1, B6 y B12) y de vitamina C, que ayudan a reducir el estrés oxidativo, tienen una potente acción detoxificante y apoyan la función celular, esto implica que tengan un poderoso efecto antiedad. ¿Podemos aprovechar estas maravillosas propiedades para cuidar la piel?

Kombucha en la piel

Parece ser que el éxito de la kombucha no se limita al mundo gastronómico saludable, también se ha probado su efecto para cuidar la piel y los resultados han sido formidables. ¿De qué nos podríamos beneficiar al aplicar kombucha en la piel? “Las aplicaciones cosméticas se centran en los preparados antienvejecimiento ya que, este ingrediente tiene la capacidad de incrementar la población de adipocitos de la piel y reestablecer el volumen correcto en las zonas deficitarias”, indican desde Gloü Organics. Es decir, la kombucha también actúa como relleno para las arrugas y proporciona al rostro una mejora en cuanto a luminosidad y suavidad. ¡Wow!

Otra de sus grandes virtudes es su acción purificante y antiinflamatoria para tratar las pieles con tendencia acneica. “Su efecto antibacteriano ayuda a la piel a deshacerse de las toxinas y radicales libres reduciendo las impurezas e hinchazón y tratando la dermis para alcanzar el equilibrio correcto de su microbioma”, asegura la cofundadora de la firma cosmética.

Por lo tanto, la kombucha, contra todo pronóstico y para nuestra sorpresa, va a ser un ingrediente perfecto para añadir en la lucha contra el envejecimiento prematuro, un redensificador natural y un poderoso aliado para lograr un efecto detox en la piel. Ahora solo nos queda saber cómo podemos usar la kombucha en casa.

¿Cómo podemos utilizarla en nuestro ritual cosmético?

Ya sabemos que la kombucha es un ingrediente muy beneficioso para la piel pero ¿existen fórmulas específicas de aplicación cosmética a base de kombucha? ¿Cómo podemos aplicar la kombucha en la piel? “Lo primero que debemos saber es que la forma bebible no debe entrar en contacto con nuestra piel, ya que es más ácida y podría producir molestias, irritación e incluso interrumpir la estabilidad de la flora cutánea”, advierte Zaldívar. En su lugar, lo apropiado será utilizar productos especialmente diseñados para el uso tópico. No se te ocurra ponerte directamente la kombucha fermentada directamente en la piel.

No solo la kombucha equilibra el microbioma de la piel también ayuda a reducir la inflamación, es un magnífico ingrediente exfoliante y cuenta con multitud de antioxidantes. Varias firmas han lanzado al mercado productos cosméticos que tienen como ingrediente estrella la bebida probiótica de moda. Marcas como Skinceuticals, Fresh, Klairs o Gloü Organics cuentan con productos formulados con kombucha para aprovechar sus increíbles propiedades.

¿Te animas a dar un paso más allá en tu rutina de cuidado y pasar la kombucha de la nevera al neceser? Todo son ventajas.