¿Haces más ejercicio físico del que deberías? 5 síntomas de que estás sobreentrenando

Está científicamente probado que realizar deporte es beneficioso para la salud, pero de lo que no se habla tanto es de… ¿Cuándo debo parar y descansar? Como sabemos, el descanso es fundamental para poder recuperar cuerpo y mente y rendir bien durante el día. Entre machacarse en un gimnasio y llevar una vida sedentaria existe un término medio. Si el ejercicio se convierte en obsesión, hay que parar y reflexionar. No existe el cuerpo perfecto… ¡Date un respiro!

Es más, si nos exigimos por encima de nuestras posibilidades, puede que logremos el efecto contrario, es decir el sobreentrenamiento:  una fatiga generalizada que afecta a nuestro cuerpo y mente y que nos impide progresar. Este estado se debe a una excesiva carga de trabajo, volumen o intensidad.

5 síntomas que confirman el exceso del sobreentreno

1. Cansancio: Un estudio de Sports Medicine aclara que el deportista que no se recupera en 72 horas está sobreentrenado y su ritmo cardíaco se ve alterado por el exceso de trabajo. La falta de una dieta equilibrada aumenta los problemas circulatorios o cardíacos.

2. Cambios de humor: Los cambios de humor repentinos desembocan en estrés y ansiedad debido a la falta de descanso. En la rutina deportiva es más importante la calidad que la cantidad. Una vida saludable y sin excesos es la clave y, si es posible, pasar un control médico preventivo, controlar el peso y nuestra actitud en el momento de iniciar el ejercicio.

3. Problemas para conciliar el sueño: La dificultad para conciliar el sueño viene provocada por un exceso de hormonas del estrés, que coincide con un entreno excesivo. El agotamiento físico dificulta dormir. Un hábito de sueño adecuado ayuda a recuperar la inmunología alterada en el entreno, Junto al sueño es importante cuidar la dieta e ingerir hidratos de carbono complejos (pasta, arroz, legumbres, pan…), puesto que liberan energía de manera progresiva.

4. Pesadez en las extremidades: Psychology Research and Behaviour Mangement publicó los resultados de una investigación en la que se explica que los hormigueos, contracturas y calambres se acentúan cuando las extremidades se sobrecargan. Si el ejercicio es excesivo se dañan las articulaciones. rodillas, caderas e incluso la columna. También puede aparecer pérdida de masa muscular. Las lesiones aparecen durante el entrenamiento. La Universidad de Granada constata un aumneto de patologías osteomusculares (dolor de cuello, lumbalgia) como consecuencia de la excesiva práctica deportiva.

5. Las defensas se debilitan: Si las defensas caen debido al agotamiento, caeremos enfermos. La actividad física prolongada acelera la mente y el cuerpo con sensación de estar siempre activos, por tanto, es básico practicar deporte de forma moderada. Existe una relación en forma de “U” entre el deporte y el riesgo de mortalidad: los extremos ( el exceso y el sedentarismo) presentan riesgos cardiovasculares. Lo ideal es dedicar de 30 a 50 minutos de ejercicio vigoroso o de 120 minutos de ejercicio moderado. Un estudio de la Universidad de Philadelphia recomienda visitar un terapeuta o acudir a un profesional médico para recibir el tratamiento adecuado.