Mócteles navideños sin alcohol para tener las fiestas en paz…

Brindar sin miedo, celebrar sin bochorno y sobrevivir a la familia sin perder la compostura: bienvenidos a la Navidad 0,0. Un territorio donde las bebidas son bonitas, sabrosas y con más personalidad que muchos invitados. Aquí, una selección de cócteles de navidad sin alcohol tan sugerentes que nadie preguntará “¿por qué no bebes?”. Y si lo hacen, siempre puedes contestar: “Porque puedo”. Cuatro recetas de algunos de los restaurantes más cool del momento y una sorpresa. Para que bebas bonito, con actitud y propósito… Y sin resaca. 

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Beso de Coco, de Javier Quiñones, director y bartender de Tepic

Personalidad: el teletransporte emocional. Te saca de la cocina familiar y te deja mentalmente en un chiringuito silencioso, incluso mientras alguien pregunta por tu vida sentimental.

Qué lleva: un mix dulce-digestivo con 7 cl de horchata de arroz, 2 cl de crema de coco, 1 cl de puré de plátano, todo shakeado con abundante hielo. Se sirve en un coco natural vaciado, se cubre con hielo picado, se añade ginger ale para darle chispa y se termina con hojas de piña y fruta deshidratada y un toque de canela flambeada para un plus de dramatismo.

Cómo sabe: cremoso, goloso y con ese toque de jengibre que te despierta del letargo post-cordero.

Por qué funciona en Navidad: porque nadie discute si apareces sujetando un coco que humea. Es ciencia social.

Tepic: Calle Ayala, 14, Madrid.

Rosato Spritz, de Colo Linari, barman ejecutivo de Nota Blu New Brasserie

Personalidad: el classy sin drama. Perfecto para brindar como si fueras protagonista de un anuncio italiano… pero durmiendo como un bebé esa misma noche.

Qué lleva: Martini Vibrante 0,0% como base, un toque de gin 0,0%, zumo de pomelo y Schweppes Selection Hibiscus para rematar ese tono rosado festivo. Se sirve con hielo abundante y una rodaja cítrica.

Cómo sabe: seco, floral, fresco y con la misma presencia que un espumoso, pero sin el golpe moral..

Por qué funciona en Navidad: porque queda bonito y te deja la mente despejada para tomar decisiones inteligentes. Como apagar el móvil a tiempo.

Nota Blu New Brasserie: Calle Claudio Coello, 10, Madrid, y Camino de la Cruz s/n, Marbella (Málaga)

Maiko Highball, de Nagore Arregui, bartender de Makoto

Personalidad: el zen festivo. El cóctel que parece decirte “inhala, exhala”, justo antes de que empiece la batalla del amigo invisible.

Qué lleva: Bombay Sapphire 0,0% (1.50 oz), shochu kuromake 0,0% (0.50 oz), sirope de hibisco (1 oz), zumo de naranja (0.50 oz) y zumo de yuzu (0.25 oz). Se agita con hielo y se sirve en vaso alto con hielo, añadiendo tónica floral (2 oz) y una rodajita de naranja deshidratada.

Cómo sabe: cítrico, floral, limpio y con un toque nipón que ordena el caos (externo, no el interno, pero algo es algo).

Por qué funciona en Navidad: porque te baja la frecuencia cardíaca sin tener que refugiarse en el baño.

Makoto: Calle del Marqués de Villamagna, 1, Madrid.

Nightcap Spicy Margarita, de Ancient & Brave

Personalidad: es como la prima atrevida de la familia. Esa que llega a la cena, saluda con dos besos y te guiña un ojo porque sabe que diciembre es más divertido con un poco de picante. Es el móctel perfecto para cerrar la noche sin cerrarte los párpados antes de tiempo.

Qué lleva: 1 scoop de True Nightcap, de Ancient + Brave (un suplemento nutricional diseñado para apoyar la relajación nocturna), 1/2 taza de zumo de lima, 1/2 taza de agua de coco, 1/4 taza de zumo de naranja, 1–2 cucharaditas de sirope de agave al gusto y una pizca de cayena. Se agita fuerte con hielo y se sirve sobre hielo (mejor si es picado), con un borde opcional de sal con chile y una rodaja de lima para rematar el espectáculo.

Cómo sabe: ácido, fresco, ligeramente dulce y con un golpe especiado que despierta hasta a quien se quedó dormido viendo Love Actually por sexta vez.

Por qué funciona en Navidad: porque es festivo, atrevido y cero culpable. Da la sensación de estar pecando… cuando en realidad estás hidratándote.

San Marzano Power, de Ciro Cristiano, chef y propietario de Baldoria

Personalidad: es el adulto responsable, pero con estilo. Una especie de bloody mary zen.

Qué lleva: agua infusionada con tomate San Marzano, vinagre balsámico de Módena, arándanos frescos y un toque aromático de romero.

Cómo sabe: jugoso, profundo, ligeramente ácido y lleno de matices rojos navideños.

Por qué funciona en Navidad: porque te hace sentir sofisticado incluso con un jersey de renos.

Baldoria: Calle de José Ortega y Gasset, 100, Madrid