10 señales de que tienes una relación tóxica

Construir relaciones saludables requiere de esfuerzo, comunicación, respeto y ganas por ambas partes, especialmente cuando hablamos de parejas románticas. Son muchos los que se ven involucrados con personas que les producen más tristeza y malestar que alegría y acaban envueltas en relaciones tóxicas. Identificar el problema y reconocerlo es el primer paso para ponerle solución. Te contamos cuáles son las 10 principales características de una relación tóxica.

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¿Qué son las relaciones o personas tóxicas?

El sufrimiento es el primer adjetivo asociado a una relación tóxica. Cuando la balanza de lo que nos aporta esa persona está desequilibrada y pesa más lo malo que lo bueno, no cabe duda de que no nos encontramos en una relación saludable. Este malestar puede ser producido solo por una de las personas que componen la pareja o bien puede ser recíproco, sin embargo, «normalmente existe una desigualdad entre ambas partes porque uno de los dos ejerce su control sobre el otro», explica la psicóloga Noelia Bisbal. Esta persona «suele manipular, menospreciar y chantajear emocionalmente a la otra», añade.

A menudo la falta de inteligencia emocional, una baja autoestima o los celos son los desencadenantes de la mayoría de discusiones y problemas en este tipo de relaciones. Además, a la hora de abordar las conversaciones más difíciles no existe el respeto mutuo, y tampoco hay confianza y apoyo y el miedo a la reacción del otro puede condicionar nuestras acciones e impedirnos actuar libremente. El miedo es una señal de alarma y nunca debería formar parte de una relación sana.

Por otro lado, una relación saludable es aquella en la que, dentro de los límites marcados por ambos, existe libertad para actuar y decir lo que queremos. En ella predomina la felicidad, se nos permite crecer individualmente y en común y existe un apoyo mutuo a pesar de la diferencia de opiniones y de los altibajos que puedan surgir.

Las consecuencias de una relación tóxica pueden ser muy graves para las personas que la sufren. Por ello, es importante estar atento a las señales que comentaremos a continuación y así puedas detectar si estás en una.

1. Los celos y la desconfianza

Si estos dos sentimientos están frecuentemente presentes en vuestra relación es muy posible que se trate de una relación tóxica. ¿No puedes hablarle de terceras personas sin que se moleste? ¿Sientes que no tienes privacidad? ¿No te cree o te acusa de haberle traicionado de algún modo sin motivos? Estas son algunas de las señales inequívocas de que una relación es poco saludable.

2. Critica y te distancia de tus seres queridos

No le gustan tus amigos o tus familiares, te ofende al hablar de ellos y no le gusta que pasar tiempo con ellos o que lo hagas tú a solas. Si estas actitudes no cambian irán a peor y puede que acabe forzándote a escoger entre tus seres queridos y él o ella.

3. Evitas los conflictos

Si rechazas planes antes de consultarle a tu pareja, evitas comentarle algo porque crees que se va a molestar o cedes ante lo que la otra persona quiere para no enfrentarte a discusiones es probable que sea porque tienes miedo de su reacción, ya que la otra persona se enfada contigo con facilidad.

4. Justificas sus acciones (ante otros y a ti mismo)

A menudo, cuando tu entorno cercano te comenta una actitud negativa de tu pareja, tratas de dar explicaciones como «ha tenido un mal día», «está pasando por un mal momento en el trabajo» o frases similares, puede que estés tratando de justificar sus malos comportamientos y pasarlos por alto. Incluso puedes llegar a sentirte responsable y culpable de sus reacciones.

5. Se mete con tus capacidades, tu aspecto o tu físico

Los menosprecios, humillaciones e insultos son una clara falta de respeto. «Si repite constantemente comentarios como ‘has engordado’, ‘te estás quedando calvo’, ‘no sabes hacer nada bien’ y resalta tus inseguridades está cruzando una ‘línea roja'», comenta la psicóloga Noelia Bisbal.

6. Te compara con otras personas

Especialmente si te compara –de forma peyorativa– con una ex pareja, es muy posible que se trate de una relación tóxica y que lo haga «con el fin de provocar celos e inseguridades», asegura la psicóloga.

7. Toma decisiones sin consultar que os afectan a ambos

Esto hace referencia a confirmar o cancelar planes con terceras personas que os incluyen a los dos, gastar una cantidad importante de dinero que os pertenece a ambos sin consultar, planificar tu vida y tu tiempo sin tu permiso, etc.

8. Te culpabiliza de sus problemas

Te hace responsable de sus problemas laborales o con personas ajenas a la relación en lugar de asumir su culpa.

9. Deja de hablarte cuando se enfada

Después de una discusión o de un comentario con el que no está de acuerdo, le hablas y decide ignorarte o solo te hace un mal gesto, a penas te mira o actúa como si no estuvieras está imponiendo «la tiranía del silencio», lo que es una forma de manipulación, también conocida como “ley del hielo”. Este tipo de reacciones suele darse entre personas inmaduras y manipuladoras.

10. Le molesta que hagas planes que no le incluyen

Se enfada y no le parece bien que ocupes tu tiempo en algo que no sea estar con él como ir al gimnasio, a clases de inglés, viajes de trabajo o hacer actividades con otras personas, sobre todo si no las conoce. «Querer estar siempre con tu pareja es entendible y es un síntoma de amor, pero impedir o molestarse porque hagas planes que no le incluyen es inadmisible», afirma la psicóloga.