Cris Blanco: «Estoy a favor de que se hayan eliminado las pajitas de plástico»

Con sólo 26 años ha logrado convertirse en una figura destacada en el panorama digital, donde reúne una comunidad de más de 800 mil seguidores en Instagram, 4 millones en TikTok, 300 mil suscriptores en Youtube y 12,6 mil oyentes mensuales en Spotify. Pero más allá de las cifras, Cris Blanco es una creadora de contenido que ha sabido conectar con su público a través de un enfoque único: la honestidad, el compromiso ético y una mirada cercana hacia los temas que realmente importan.

Licenciada en Derecho y Administración de Empresas (ADE), Cris siempre sintió una pasión especial por el mundo de la comunicación. Esa inquietud la llevó, en 2020, a abrirse un espacio en TikTok donde comenzó publicando vídeos sobre un tema fundamental y muchas veces dejado de lado: la salud mental. Con un tono fresco y auténtico, abordó aspectos como la amistad, las relaciones familiares, las parejas, y la importancia de cuidarse a uno mismo. Su enfoque empático e inclusivo llegó a miles de personas, impulsando el crecimiento de su comunidad.

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Con el tiempo, su éxito en las redes la llevó a lanzar su propio podcast, Como si nadie escuchara, un proyecto que se ha consolidado como una plataforma para explorar a fondo los temas que toca en sus vídeos. En él, Cris comparte sus experiencias y reflexiones personales, animando a su audiencia a reflexionar y a tomar decisiones que fomenten un estilo de vida más ético, responsable y empático. Para Cris, su misión es clara: inspirar a una generación a construir un futuro guiado por valores sólidos y un profundo respeto por uno mismo y hacia los demás.

Una influencer fiel a sí misma

Aunque ha enfrentado críticas, como muchos jóvenes que trabajan en el mundo digital, Cris ha sabido mantenerse fiel a sí misma. Rechaza los estereotipos que etiquetan a los creadores de contenido como superficiales o frívolos, y su trayectoria demuestra que puede ser auténtica, profesional y profundamente comprometida con los problemas actuales.

Uno de esos compromisos es la sostenibilidad, un tema que ha ido integrando poco a poco tanto en su vida personal como en su contenido. Para Cris, la sostenibilidad no es sólo una tendencia, sino una responsabilidad que todos debemos asumir. En su día a día, apuesta por reducir el consumo de plásticos, optar por productos reutilizables, apoyar marcas éticas y fomentar el consumo responsable. Además, utiliza su plataforma para educar e inspirar a su audiencia sobre la importancia de combatir el cambio climático a través de pequeños gestos cotidianos.

Tiene una visión que combina la autenticidad y el deseo de cambiar las cosas para mejor, Cris Blanco no es una influencer más; es una voz que nos recuerda que la sencillez, la sinceridad y los valores pueden marcar una gran diferencia en un mundo que lo necesita.