Stop al envejecimiento: incluye estos polifenoles en tu dieta y alucina con los resultados

En el camino por mantenernos sanos y activos, vamos incorporando nuevos conceptos o palabras a nuestro vocabulario, y de repente hablamos de ritmos circadianos, de alimentos fermentados o de la tumba metabólica, con una soltura de experto. En esta ocasión vamos a conocer a los polifenoles, con sus múltiples beneficios y su capacidad para combatir el exceso de radicales libres de nuestras células.

Están presentes en el reino vegetal y los tenemos más a mano de lo que imaginas. Llevar una dieta rica en estas sustancias es una garantía para nuestra salud cardiovascular, la inflamación crónica y la diabetes, así que toma nota de los alimentos que no pueden faltar en tu despensa.

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Hablemos de polifenoles

Si te gusta cuidarte seguro que la palabra ya te suena, porque ha quedado claro que el consumo de polifenoles es indispensable para el buen funcionamiento de nuestro organismo, especialmente debido a sus propiedades antioxidantes.

Son sustancias no nutritivas puesto que no aportan calorías, ni vitaminas o minerales, sino que son bioactivas, lo que quiere decir que influyen en la actividad celular y en los mecanismos fisiológicos, mejorando la salud en términos generales.

Los polifenoles están presentes en las plantas y existen varios tipos, como los flavonoides, quercetina, lignina y lignano, kamferol, resveratrol, catequinas o los taninos del vino. Aunque estos últimos son considerados antinutrientes porque pueden llegar a dificultar la absorción del calcio y del hierro.

Están presentes en muchos alimentos de origen vegetal, cuyas propiedades biológicas los hace especialmente interesantes. Piensa que la oxigenación de nuestras células produce radicales libres y, aunque en pequeñas dosis son necesarios, en exceso son el principal causante del envejecimiento, así como precursores de enfermedades cardiovasculares, cáncer, diabetes, e incluso otras de carácter degenerativo.

Aquí es donde entran en acción estas sustancias capaces de frenar el daño celular oxidativo, así como de combatir muchas de la enfermedades que aparecen con el paso del tiempo. ¿Quieres saber algunas de sus bondades?

Beneficios de los polifenoles

• Como hemos mencionado, tienen una gran capacidad antioxidante, manteniendo los radicales libres bajo control. Lo que se traduce en que son nuestros aliados frente a los signos del envejecimiento.
• Estupendos antiinflamatorios. Los polifenoles son fundamentales para combatir muchas enfermedades de origen metabólico, como la obesidad y la diabetes. Además, en este estudio, se ha demostrado que son muy positivos para la adiposidad corporal, ayudándonos a mantener un peso saludable y a buena composición física.
• Actúan positivamente en la transformación de grasa en energía y disminuyen los triglicéridos.
• Mantienen los niveles de glucosa en equilibrio, puesto que estimulan la secreción de insulina.
• ¿Sabías que son prebióticos? Cumplen la función de alimentar a nuestra microbiota, lo que garantiza que gocemos de una buena salud y un sistema inmune a prueba de bombas, como se demostró en este estudio de la Universidad de Padova, Italia.
• Uno de sus efectos más potentes, es su capacidad para prevenir la aparición y el desarrollo de arterioesclerosis, es decir, la obstrucción de las arterias por acumulación de lípidos.
• Tienen un efecto vasodilatador y antitrombótico, así como antiaterogénico, lo que se traduce en que son muy útiles para relajar las paredes de venas y arterias.

Estos alimentos te darán un chute de antioxidantes

Ahora que sabemos todos los beneficios que tienen los polifenoles, toca incluirlos en la dieta. Te va a sorprender la cantidad de alimentos que los tienen y lo mucho que te gustan algunos de ellos.

• Cacao. El chocolate es rico en flavonoides, así que deja de sentirte culpable por comerte ese trocito después de cenar. Elígelo siempre con el mayor grado de pureza posible, es decir, mejor un 70%, que un chocolate con leche. Y si te falta inspiración. mira estas recetas irresistibles.
• Aceite de oliva. De nuevo el grado de pureza es importante, aunque tenemos la suerte de vivir en uno de los mayores productores de AOVE del mundo. Este aceite tan saludable no puede faltar en tu día a día porque contiene diferentes compuestos fenólicos, entre los que destaca el oleocanthal, un potente antioxidante.
• Té negro y té verde. Ricos en taninos y en catequinas, respectivamente.
• Frutos secos y semillas. Incorporar pistachos, nueces, almendras, semillas de lino, de chía o de sésamos en nuestra dieta diaria, aporta un montón de nutrientes. Son grandes antioxidante y ricos en liganos y ligninas.
• Frutas y verduras. Son especialmente interesantes los frutos rojos, la remolacha, los espárragos, las berenjenas, los tomates, etc.
• Legumbres. Son una fuente de proteína indispensable, sobretodo si quiere consumir menos carne. Contienen flavonoides, ligninas y lignanos.