Cómo identificar a las personas tóxicas y qué hacer para evitarlas

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Saber identificar a las personas tóxicas es el primer paso para evitar situaciones desagradables que puedan perturbar tu bienestar. Y lo primero que debes entender es que una actitud tóxica no sólo existe en una relación de pareja, sino también en una de amistad o incluso familiar. Y es que las actitudes destructivas de una persona tóxica pueden reflejarse en todo tipo de situaciones, independientemente del vínculo que tengas con el resto.

Una de las frases que más escuchamos hoy en día es esa de que «ya no hay nadie normal» (y, si no la has escuchado, es que la has dicho tú). Paradójicamente, ahora que se habla más de salud mental es cuando más tóxicas vemos a las personas que nos rodean. Quizá es porque hemos aprendido a identificar comportamientos dañinos que antes considerábamos normales o, probablemente, porque la empatía y la responsabilidad emocional, cada vez más, brillan por su ausencia. Estas son todas las cosas en las que te debes fijar, según los expertos, para identificar el efecto que tienen en ti aquellos que forman parte de tu círculo social.

Pero ojo: como explica la psicóloga Silvia Congost en su libro Personas Tóxicas, encajar en uno o dos puntos de estas actitudes no significa padecer un trastorno necesariamente. «Uno puede tener un pronto fuerte o ser más agresivo en determinados momentos y no por eso tener un trastorno de personalidad», afirma.

A continuación desgranamos un listado de aquellos perfiles que podríamos catalogar como tóxicos:

Personas cambiantes en todo

Ser muy volátil –es decir, cambiar de opinión a cada paso– es una de las características de las personas con trastorno límite de la personalidad (TLP), según Congost. Por supuesto, esto no quiere decir que si encuentras a alguien con esta característica tenga TLP sí o sí. Pero es uno de los comportamientos tóxicos que te pueden mantener en alerta sobre las conductas de esa persona. Las personas cambiantes en todo son las que un día quieren una cosa y al día siguiente otra, las que modifican constantemente sus objetivos en la vida, sus proyectos profesionales, etc.

Personas mentirosas

Identificar a una persona mentirosa, en principio, puede resultarnos difícil si no la conocemos bien y si no sabemos nada de su entorno, pero para esto también hay herramientas. Como explica Congost en su libro, las personas mentirosas engañan continuamente, estafan y abusan de los demás, y este comportamiento forma parte de un trastorno de personalidad antisocial. Darte cuenta de este comportamiento también te ayudará a tener indicios sobre alguien que puede ser tóxico y que podría traerte dolores de cabeza en un futuro.

Personas sin empatía

Esta es una de las características del trastorno de la personalidad psicopática, según explica la psicóloga. El comportamiento de las personas que tienen poca o ninguna empatía emocional puede identificarse prestando atención a cómo reaccionan cuando les cuentas alguno de tus problemas o preocupaciones. Normalmente son personas que se sumergen en sí mismas y no son capaces de separar su punto de vista del que tienen los demás. Vamos, aquellos que al contarle lo que te ha pasado te responden con un: «Pues a mí…»

Personas que desprecian

Aquellos que desprecian a los demás de forma persistente tienen una característica de trastorno de personalidad antisocial, cuenta Congost. Son personas con un perfil rígido y emocionalmente inmaduros. Además, otro de los rasgos que notarás en este tipo de personas, según asegura la experta, es que necesitan ser siempre aceptados por los demás, son personas con tendencia a la ira y que tienen poca tolerancia a la frustración.

Ahora que ya tenemos claros los distintos perfiles de las personas tóxicas, deberíamos seguir el consejo de los psicólogos Luis Muiño y Mónica González, que en el podcast Entiende Tu Mente recomiendan alejarse de ellas. Sin embargo, en determinadas situaciones es complicado. En los casos familiares (por ejemplo, ¿cómo rompes con tu madre?) es más difícil conseguirlo, pero sí se puede hacer un alejamiento emocional, aseguran. Si quien tiene un comportamiento tóxico es alguien a quien te une un vínculo muy fuerte, debes conseguir que te afecte lo menos posible. Se trata de poner lo que ellos denominan «una barrera emocional», es decir, cambiar tu forma de compartir tu vida con esas personas: si no les haces partícipes de lo que te ocurre, no tendrán información para opinar sobre ella. Es importante no hacerlo con un desgaste emocional alto, ya que si llegas a este punto te puede invadir un sentimiento de culpa.