Dakota Johnson dice que duerme 14 horas (y revoluciona Internet): ¿es saludable dormir tanto?

Hay quien necesita dormir ocho horas seguidas para poder afrontar la jornada, pero también a quien le es suficiente con cinco horas. Siempre se tiende a pensar que quien más duerme es el que mejor descansa y esto es un error. A pesar de ello, nos dejamos llevar por las rutinas de las celebrities y la última en descubrirnos la suya ha sido Dakota Johnson. La actriz de 50 sobras de Grey ha explicado a The Wall Street Journal Magazine, cuáles son sus hábitos de vida para sentirse bien y uno de ellos es dormir 14 horas seguidas. Frente a esto, todos nos preguntamos: ¿es bueno dormir tanto?

«No soy funcional si duermo menos de 10 horas. Dormir es mi prioridad número uno en la vida. Puedo dormir 14 horas seguidas», asegura la hija de Melanie Griffith. A esta rutina también se suman prácticas como la meditación trascendental. «Últimamente me dedico mucho a la respiración y eso me ha ayudado mucho con la ansiedad», explica. En este sentido, las prácticas que realiza la actriz se convierten en un faro de luz para muchos, ya que se trata de una persona que numerosas veces ha hablado sobre sus problemas de salud mental, sobre la depresión y sobre la importancia que tiene para ella saber manejar sus emociones.

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Cuántas horas se debe dormir

Pero en temas de bienestar, no todas las rutinas que se dan por saludables son igual de efectivas para todo el mundo. Así lo confirmaba Iván Eguzquiza en su ponencia en WeLife Duerme, celebrado el pasado mes en NH Collection Madrid Eurobuilding. «No todos tenemos que dormir lo mismo. Hay personas que necesitan dormir poco porque hay gente que tiene un sueño muy eficiente. Luego hay otros que tienen sueño de peor calidad o problemas de melatonina y por ello necesitan dormir cerca de nueve o diez horas. Además, incluso la misma persona, en función de cómo sea su calidad de sueño y del momento, necesita más o menos número de horas», aseguró.

Hay que tener en cuenta aspectos como que hay personas más nocturnas y otras más diurnas. Es decir, que viven más de día que de noche, y viceversa. «Un nocturno (que prefiere irse a dormir más tarde) tiene más despertares en la parte primera de la noche porque genera menos melatonina en ese periodo; y un diurno (que duerme a horas más tempranas) se despierta más al final porque es ahí donde genera menos melatonina», aclaró.

No todo el mundo duerme igual ni necesita dormir lo mismo. Esta fue una de las ideas que más recalcó el experto en sueño de principio a fin. A pesar de que esta afirmación sea muy clara, son muchos los mitos que giran entorno al sueño y al descanso, y esto mantiene a la sociedad mucho más preocupada por el sueño. Pero no hay que obsesionarse, sino ocuparse: la clave no está en dormir mucho, sino en hacerlo bien.

«Todas las emociones que se tienen durante el día afectan a cómo dormimos. Durante la noche el cerebro busca formas de solucionar los problemas. Se ocupa de las cosas que evitamos pensar durante la jornada. Cuando dormimos, el cerebro se limpia a sí mismo y se produce la recuperación emocional», explicó Eguzquiza. El psicólogo advirtió que quien no duerme bien, no sólo se siente más cansado, sino que también tiene más despistes y le cuesta más concentrarse.