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Cada alimento necesita una temperatura y un tiempo de conservación./ Foto: Loves hack fancy.
Alimentación
No dejar enfriar demasiado la comida, separar la carne y el pescado u organizar bien el frigorífico son algunos de los consejos de los expertos.
Por Paka Díaz
5 de diciembre de 2023 / 12:46
Un informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 2019 señalaba que unos 600 millones de personas cada año sufren infecciones debido al consumo de alimentos en más estado. La razón más habitual es la mala conservación de la comida y guardarla más tiempo del adecuado, lo que hace que puedan proliferar las bacterias. Más de 400.000 personas mueren cada año en el mundo debido a ello. Por eso, aprender a conservar bien los alimentos es fundamental para ahorrarnos problemas.
La nutricionista Lucía Redondo decidió escribir el libro Ama lo que comes para “enseñar a la gente a disfrutar comiendo sano”. Esta experta en nutrición natural, formada en alergias alimentarias por Nutriscience, además es la fundadora de la escuela de cocina sana Cocinando el cambio, que cuenta con más de 15.000 alumnos. Para ella es esencial “que todo lo que comamos sea saludable, pero que nos guste y lo disfrutemos”.
Su libro, muy práctico, está estructurado en tres pilares fundamentales. “El primero es hacer una lista de la compra con ingredientes y alimentos saludables”, enumera, “el segundo, el sabor, porque es muy importante utilizar alimentos, especias, salsas y aderezos, que aporten mucho sabor a los platos para que nos encanten”. Y por último recalca la importancia de “la organización para no pasarse horas en la cocina”. Pero, además, dedica bastantes páginas a explicar cómo conservar los alimentos para evitar los errores más frecuentes que solemos cometer.
Entre los errores más frecuentes en cuanto a conservar alimentos que se suelen cometer, Lucía Gómez destaca: “dejar enfriar mucho tiempo los platos que se preparan antes de meterlos en la nevera, o guardar la carne y el pescado frescos juntos, sin separar correctamente”.
Estos fallos pueden conducir a desperdiciar la comida: «Además de que se pierdan propiedades nutricionales de los alimentos”, recuerda la experta, pueden propiciar “que se estropeen los alimentos y tengamos que tirarlos». Pero no sólo eso, también recalca que “pueden traer consigo que se desarrollen bacterias y contaminaciones que pueden dar lugar a intoxicaciones alimentarias.»
Como explica Gómez en su libro, según la OCU (Organización de Consumidores y Usuarios) la temperatura idónea sería por debajo de los -18ºC en el congelador. En la nevera, carnes y pescados deben conservarse entre 1 y 4ºC, y el resto de alimentos a 5ºC.
En cuanto al tiempo que se pueden conservar los alimentos, la nutricionista indica que “depende un poco de cada alimento y de si está crudo o cocinado”. Por ejemplo, el pescado se mantiene uno o dos días en la nevera. Los blancos aguantan seis meses en el congelador y tres meses aproximadamente los azules.
Los mariscos también serían dos días de nevera y entre tres y seis meses congelados. La carne de vacuno o cerdo dos días de frigo, y de seis a doce meses de congelador. Sin embargo, el pollo dura entre uno y dos días en la nevera y de seis a diez meses congelado. Y ojo, porque también señala que hay que mirar la fecha de caducidad de los huevos, algo que no se acostumbra a hacer.
Por otra parte, en cuanto a alimentos cocinados, todas las preparaciones que lleven huevo crudo deben de comerse de inmediato. Los huevos cocidos duran una semana, no más, en la nevera y no se pueden congelar. Los postres caseros o las verduras aguantas tres o cuatro días en la nevera, y la pasta entre tres y cinco días. Si los congelas, las sopas y cremas o los guisos aguantan de tres a cuatro meses, y las verduras alcanzan hasta doce meses.
Entre las recomendaciones que da Lucía Gómez para conservar los alimentos de forma correcta, destacan:
Coloca bien los alimentos en la nevera. La experta señala que “aunque tardes un poco más en colocar la compra, no la guardes a la ligera y piensa dónde debe ir cada alimento. En las zonas menos frías las frutas y verduras que necesiten refrigeración, en las zonas de frío intermedio los yogures y platos cocinados, y en las zonas más frías el pescado y carnes”.
No cargues mucho el frigorífico. Recuerda que “también es importante que no cargues en exceso la nevera para que el frío llegue a todas partes”.
Mejor envases de cristal. Si vas a conservar alimentos, mejor hazlo en frascos de cristal. “Que las preparaciones que adelantes y cocines no las guardes en tuppers de plástico, que sean de cristal para evitar tóxicos. Y que sean envases bien cerrados y separados”, anima.
A la nevera en cuanto deje de quemar. El principal consejo de Gómez en este sentido es no tardar mucho en meter en la nevera la comida cocinada. «En cuanto deje de quemar la puedes guardar, no tiene que enfriarse fuera. Sobre todo hay que tener mucho cuidado en verano”, alerta.
Anota las fechas. Un truco muy bueno para controlar los alimentos que quieres conservar, señala la experta, consiste en que, “cuando vayas a congelar, anotar la fecha en la que los has guardado para poder ver hasta cuándo se conservan y que no se acumulen”. Y por último, recuerda que en su libro Ama lo que comes, “cuento muchos más”.
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