
Cuando estás mal, no puedes razonar. Estás secuestrado por la parte más impulsiva del cerebro. Hay que esperar a que pase la tormenta. Foto: D.R
Mente
Conversaciones feedback: la técnica para discutir menos y quererse más que siguen las parejas de larga duración
Una psicóloga revela el hábito que lleva practicando 27 años y que ha convertido en su mejor receta para el amor duradero.
Por Paka Díaz
27 DE AGOSTO DE 2025 / 13:43
Quizá si Bridget Jones hubiera conocido las conversaciones feedback le habría ido mucho mejor en sus relaciones. Quizá las aplicó con Mr. Darcy y por eso fueron un matrimonio feliz. Lo cierto es que muchas veces nos cuesta hablar con quien más queremos: nuestra pareja.
Las razones por la que la comunicación falla en una relación son variadas. Incluso puedes llegar a sentir el burnout amoroso. Pero casi siempre hay una que se repite: tendemos a hablar de los problemas justo cuando estamos enfadados. Y, claro, así cuesta escucharse sin convertirse en una máquina de reproches.


La psicóloga y coach Marta Freire, autora de libros como Ponte en acción (Ed. Plataforma Editorial) o Ponte en modo DISC (Ed. Samarcanda), considera sin embargo que «hablar de lo que no va bien cuando se está bien para mí es el punto clave para que funcione una relación. Y hablarlo todo. Es lo que llamo las conversaciones feedback».
Ella sabe de lo que habla. Este tipo de charlas en pareja pueden lograr relaciones con raíces fuertes y sanas. Ella lo aplica en su matrimonio desde el noviazgo y llevan 27 años juntos y muy felices. Porque hablar de lo que no funciona cuando todo va bien puede salvar tu relación, según la psicóloga Marta Freire.
Qué son las conversaciones feedback
Las conversaciones feedback no son simples intercambios de opiniones, discusiones o monólogos emocionales. Sino que son espacios formales y conscientes donde la pareja se sienta para revisar cómo están, qué sienten, qué necesitan, qué les gusta y qué les gustaría cambiar. Pero siempre en un contexto de calma.
«Cuando estás mal, no puedes razonar. Estás secuestrado por la parte más impulsiva del cerebro, por la emoción, la amígdala. Entonces, hay que esperar a que pase la tormenta. Y después, con tranquilidad, revisar», explica Freire.
Ella y su marido iniciaron este hábito apenas cumplido el primer mes de novios. «Nos sentamos y dijimos: oye, ¿cómo te has sentido este mes?, ¿qué te ha gustado?, ¿hay algo que no te haya hecho sentir bien? En aquel momento no lo llamamos feedback, pero ya lo estábamos practicando», cuenta la experta.
Reconoce que, aunque a su entonces novio le costó al principio, porque no estaba tan acostumbrado a hablar de sus emociones, le encantó la propuesta. «Nos dimos cuenta, los dos, de que nos era muy útil. Y ahí seguimos», recalca.
El amor en equipo
Freire insiste en que la pareja debe funcionar como un equipo. «Un equipo que rema en la misma dirección, con objetivos compartidos. Si no se alinean los valores, los sueños y el proyecto común, la relación empieza a fracturarse», indica.
Las conversaciones feedback ayudan, precisamente, a asegurar esa alineación. Permiten revisar si se están construyendo juntos los cimientos de la relación, o que ella define como «los ladrillos que sostienen una casa fuerte». Y, si no es así, toca corregir el rumbo.
«Cada uno pone su ladrillo. Y luego hay grava entre medio: las pequeñas cosas del día a día que hacen que esos ladrillos se unan. Como ponerle una canción que le gusta, o agradecer un gesto. Eso es lo que da solidez», recomienda Freire.
Los errores más frecuentes al comunicarnos
Uno de los mayores problemas al comunicarnos cuando estamos en pareja es el mal uso de la emoción y la interpretación. «Cuando comunicamos desde la emoción cruda o desde nuestras percepciones sin datos concretos, entramos en la trampa de la inferencia», subraya la coach.
Inferir es asumir que algo es cierto sin haberlo confirmado. Por ejemplo, puedes pensar que alguien no te ha llamado porque no le importas. O sea, es explicar algo por ideas que te surgen, en vez de con hechos reales. «Hacerlo es muy peligroso porque puedes montar una película entera sin datos reales. Y eso daña la confianza», afirma Freire.
Por eso, la psicóloga sugiere basar las conversaciones feedback en tu relación en evidencias concretas. «No se trata de decir: me hiciste sentir mal. Sino de señalar una acción concreta: ayer, cuando dijiste eso delante de tu madre, me sentí expuesta, me dolió», anima a hacer.
Cómo tener una conversación feedback
Marta Freire propone una estructura simple y poderosa, que puede adaptarse a cualquier pareja. Primero, acordar el momento en el que hablar. «No se puede forzar. Debe haber un acuerdo: yo te importo, tú me importas, y los dos queremos que esto funcione. Esa es la alianza básica», apunta.
Luego recomienda empezar por celebrar antes de corregir. «Empieza por lo positivo: dos cosas que agradezco, dos cosas que valoro, dos que han funcionado. Y después, una que me gustaría que fuera diferente. Así, el otro no se siente atacado», asegura.
Después toca tener claro que no se va a una batalla. Ni tampoco ponerse en modo racional. «No se trata de ganar la discusión, sino de avanzar juntos. Si notas que estás en ‘modo razón’, detente y pregunta: ¿esto nos está haciendo avanzar?», sugiere la experta.
Se trata de escuchar y escucharte, pero cuando tu voz interior sea constructiva. Además, anima a tener curiosidad, no intención de ganar y a usar ejemplos concretos. «Cuanto más específico, mejor. Evita generalizaciones como siempre haces esto, o nunca me escuchas. En vez de eso, explica con ejemplos concretos: el martes, cuando dijiste X, sentí Y.»
Y por último recuerda que hay que convertir estas charlas en un hábito. «Poned fecha. Un café los viernes, una cena tranquila los domingos. Y si un mes no ha habido conflictos, igualmente se conversa. Porque siempre hay algo que mejorar o agradecer», aclara.
- TEMAS
- PSICOLOGÍA
WeLife hoy
Entrenar sin perezaCereal sorgoMelatonina o valerianaMitocondriasObesidad o sedentarismoSiguenos :)