Respiración abdominal, la técnica súper fácil que mejora la digestión, la claridad mental y te hace entrar en un estado de calma

Que las técnicas de respiración están de moda es un hecho. Pero no ocurre por ser una tendencia más, sino porque, al fin, hemos descubierto lo beneficiosas que son. Y aunque en algunos casos es necesario una guía profesional al lado, lo mejor es que la mayoría al aprenderlas puedes realizarlas en casa, de forma gratuita. En el caso de la respiración abdominal, es una de las más sencillas de aprender y sus beneficios son múltiples.

Como señalan Marta Planells y Juan D´Angelo, creadores del centro The Breath Act, la primera escuela de breathwork en español, «la respiración abdominal es la forma más natural y eficiente de respirar, y sin embargo, es una de las más olvidadas».

Autores Planells y D´Angelo son los creadores de The Breath Act, un método integral de respiración consciente que fusiona esta con la neurociencia, el trabajo somático y el sonido para despertar el potencial humano. Además, los expertos en técnicas de respiración consciente han publicado el interesante libro, Respiras o mueres. En él explican su método y varias técnicas, paso a paso. «Acompañamos a miles de personas en todo el mundo a reconectar con su cuerpo, liberar bloqueos emocionales y crear una vida más auténtica desde la respiración», destaca Marta Planells.

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Qué es la respiración abdominal

La respiración abdominal es la forma más eficiente de respirar y posee numerosos beneficios para la salud. «También conocida como respiración diafragmática, consiste en expandir el abdomen al inhalar, permitiendo que el diafragma descienda y los pulmones se llenen de aire», aclara Juan D´Angelo.

Además, el experto señala que «a diferencia de la respiración torácica superficial, que se activa en momentos de estrés, la respiración abdominal nos ancla en el presente. Y activa nuestra capacidad innata de autorregulación».

Beneficios de la respiración abdominal

Esta respiración, profunda y controlada, tiene un efecto calmante que promueve una reducción del estrés. Con esta técnica de respiración, también se pueden lograr incluso efectos depurativos y otros beneficios físicos, mentales y emocionales. Como explican los expertos, a nivel fisiológico, favorece la eliminación de toxinas gracias al aumento de oxigenación y al estímulo del sistema linfático.

Además, a nivel emocional, reduce la ansiedad, regula el estado de ánimo y mejora la claridad mental. «También es profundamente depurativa en el sentido energético: al respirar con conciencia, no solo oxigenamos el cuerpo, sino que liberamos tensión acumulada, emociones reprimidas y estados de estrés crónico», indica Juan D´Angelo.

Efecto en el sistema nervioso parasimpático

La respiración abdominal activa el sistema nervioso parasimpático, que es el encargado de los procesos de descanso y digestión. Al estimular este sistema, el cuerpo entra en un estado de relajación profunda: «Esto no solo mejora la salud física, sino que nos permite acceder a un estado interno de calma, seguridad y claridad. Algo tan necesario en una sociedad hiperestimulada», recalca Juan D´Angelo.

Además, el experto destaca que permite una oxigenación óptima de la sangre. Ya que al expandir el abdomen y utilizar plenamente el diafragma, se logra una respiración más profunda y lenta, que permite una mejor oxigenación de la sangre. «Esto mejora el rendimiento celular, potencia el sistema inmunológico y optimiza el funcionamiento cerebral. Cuando hay buena oxigenación, nuestro cuerpo tiene más recursos para sanar. Y para pensar con claridad y mantenernos en equilibrio. En otras palabras: respirar mejor es vivir mejor», subraya.

Masaje a los órganos

Según la Clínica Universidad de Navarra, la respiración abdominal también tiene un impacto positivo en los órganos ya que los masajea suavemente. «Esa es una de las maravillas poco conocidas de esta técnica», destaca Marta Planells, que explica que al activar el diafragma, se produce un masaje interno. Este estimula suavemente órganos como el hígado, el estómago, los intestinos y el corazón. «Esto mejora la digestión, regula el tránsito intestinal y favorece la salud del sistema cardiovascular. Es como una gimnasia suave y natural para los órganos. Además mejora la circulación linfática y energética en todo el cuerpo subraya la experta.

Por eso, aseguran que la recomiendan absolutamente todas las personas: niños, adultos, personas mayores, embarazadas, deportistas, personas con ansiedad, con insomnio, con estrés crónico… «Es una herramienta universal y accesible. No tiene contraindicaciones si se hace de forma suave y consciente. Solo en casos muy específicos como hipertensión grave o ciertos cuadros respiratorios agudos, recomendamos hacerlo con la guía de un profesional», advierte D´Angelo.

Cómo hacer la respiración abdominal en casa

La respiración abdominal es una de las técnicas respiratorias más sencillas. Básicamente consiste en llevar la atención solo a la zona del abdomen. Se llena como si fuera un globo, y luego se pone la mano al abdomen para controlarlo. Los fundadores de The Breath Act sugieren integrarla en cualquier momento: antes de una reunión, al conducir o en una pausa laboral. Pero reconocen que, personalmente, «la practicamos al despertar, para empezar el día centrados. También antes de dormir, para liberar tensiones y descansar profundamente», admite Planells. Mientras que D´Angelo recuerda que es «un ancla portátil que te devuelve al presente en segundos».

Para proceder a hacerla recomiendan sentarse o tumbarse en un lugar tranquilo. Luego colocar una mano sobre tu pecho y otra sobre tu abdomen. Inhala lenta y profundamente por la nariz. «Siente cómo tu abdomen se expande como un globo. Y asegúrate de que el pecho apenas se mueva. Entonces, exhala lentamente por la boca o nariz. Siente cómo el abdomen se vacía. Repite de 5 a 10 minutos, manteniendo el ritmo lento y sin forzar», señalan. Con estos simples pasos, y realizándola de manera regular, se consiguen numerosos beneficios. Comienzan por lograr una calma profunda.