Al contrario de lo que ocurre con el IMC, el IRC permite conocer la cantidad de grasa abdominal en el cuerpo, por lo que es mucho más preciso para evaluar el estado de salud de una persona.
Así es como puedes olvidarte de las dietas para comenzar a pensar en la nutrición como una forma de nutrir el cuerpo y sentirte bien.
Mejora la salud digestiva, acelera el metabolismo, cuida de tu corazón y resulta ideal para aliviar muchos de los síntomas de los catarros. Pero no hay que pasarse de temperatura.
No todos los hidratos de carbono son los malos de la película. Muchos de ellos no solo no provocan aumento de peso, sino que son necesarios para una nutrición óptima.
Algunos adaptógenos como la ashwagandha, el magnesio y la vitamina B6 son esenciales para mejorar el estado de ánimo y la energía. Te contamos cuándo y cómo tomarlos.
El tempeh es un alimento rico en calcio y magnesio, indispensables para el mantenimiento de los huesos. Además, favorece el aumento de masa muscular y contribuye a la pérdida de peso.
Mantener unos niveles de azúcar en sangre estables a lo largo del día también te ayudará a no sufrir altibajos de energía.
Descubre cómo los alimentos ecológicos pueden transformar tu desayuno y mejorar tu bienestar. Aprende a reconocer productos reales y a incorporarlos en tu día a día de forma sencilla.
Para mantener un equilibrio saludable en la microbiota, lo ideal es seguir una alimentación equilibrada rica en alimentos con probióticos y prebióticos como el yogur o el kéfir.
Muy rica en macro y macronutrientes, esta alga verdeazulada combate el estrés oxidativo, cuida de tu corazón, mejora tu sensación de bienestar y te protege frente a las bacterias y los virus.
El seitán es una gran fuente proteica pero su proteína no es completa, ya que le falta un aminoáciso esencial: la lisina.