Cómo la alimentación puede ayudarte a combatir el estrés de la vuelta a la rutina

Despedirnos de los días de tumbona y tranquilidad a la orilla del mar cuesta mucho. Tanto es así que, la vuelta de las vacaciones puede causar ansiedad y tristeza si no gestionamos nuestras emociones adecuadamente. Pero no vale sólo con prepararnos mentalmente, también debemos poner nuestro cuerpo a punto y aquí la alimentación juega un papel fundamental. Tras los numerosos picoteos de las tardes de verano, ahora el cuerpo nos pide tomar conciencia y toca regresar a la rutina con hábitos saludables. Para ello, Irene Domínguez, tecnóloga de los Alimentos y responsable del departamento de Nutrición de clínica Palasiet, nos aconseja no seguir dietas estrictas de blanco o negro. «Es preferible enfatizar lo positivo de la alimentación y seguir estos pequeños consejos para nutrirnos mejor día a día», asegura Domínguez.

«Cada hábito que incorporamos en nuestra rutina favorece un cambio real en nuestro cuerpo, y nuestra salud y bienestar global lo agradecen», afirma la tecnóloga de Palasiet. Es por ello que, además de prestar atención a nuestra alimentación, también es importante mantener hábitos saludables como dormir bien, hacer ejercicio o cenar temprano. Estos son los consejos de Domínguez para hacer una vuelta a la rutina más agradable y sentirnos bien.

Duerme bien

«Es importante generar rutinas que reestablezcan el ritmo circadiano«, afirma Domínguez. Para ello, propone «hacer un un horario realista para cenar, tener un rato de relax y fijar una hora razonable de irte a dormir (es mejor que siempre sea la misma aproximadamente). Un buen descanso reduce la ansiedad por el picoteo inadecuado entre horas».

TE PUEDE INTERESAR

«No compres en el supermercado si quieres hacer una comida sana»: el consejo de la doctora Odile Fernández para salvarte la vida

Consejos para afrontar la rentrée con mente positiva

Cena temprano

Domínguez también recomienda que cenemos temprano. O, al menos, que intentemos cumplir este hábito entre semana. Su consejo para cumplir con esta misión es «intenta generar ciertas horas de ayuno nocturno para que el cuerpo descanse. Si no sueles hacer ayuno, o te resulta difícil tras las vacaciones, prueba a ayunar al menos 12 horas para empezar. Si desayunas a las 8am, cena a las 8pm. Intenta que pasen al menos 3 horas entre la cena y la hora de irte a dormir».

Diseña tus platos en proporciones adecuadas

Añadir las proporciones adecuadas a cada una de tus comidas es tan fácil como utilizar las palmas de las manos. Así lo aconseja la experta, quien propone «llenar dos palmas de verdura (ensalada, parrillada, escaldada, al horno…) y mezclarlas si así lo deseas. Una palma de proteína (sepia, pechuga de pollo, pescado, dos huevos duros…) y otra palma de un carbohidrato bien escogido (quinoa, arroz integral o salvaje, pasta de espelta o una patata asada)».

Enriquece tu dieta

Además de mantener una alimentación equilibrada, hay algunos alimentos que le dan un plus a tus comidas. Domínguez habla de alimentos ricos en omega 3, que son antiinflamatorios, de vitaminas y fibra. Por ejemplo: el salmón, frutos secos naturales, aguacate, frutos rojos o cereales completos. «Siempre que puedas, prioriza comprar productos ecológicos», aconseja. Además, la tecnóloga también recomienda consumir fermentados como el chucrut, yogur o kéfir, y aliñar siempre con aceite de oliva virgen extra.

Muévete

El ejercicio es otro de los hábitos que no se pueden pasar por alto y que complementan a una buena alimentación. «Aunque sólo sean 20 minutos al día», asegura Domínguez. Puedes cumplir desde un circuito de fuerza en casa hasta apuntarte a clases de baile, pádel o andar al aire libre para soltar energía. Lo que sea para moverte y mantener tu cuerpo activo, ganar fuerza, elasticidad y, también despejar la mente. De esta manera, «complementarás de maravilla tu rutina de ejercicio semanal, estando más activo y menos sedentario», afirma la experta en nutrición.