Astaxantina, el supernutriente del salmón con poderes antioxidantes que alarga la vida

La astaxantina es un carotenoide de coloración rosada, que se genera, naturalmente, en las microalgas de agua dulce que sirven de alimentación al zooplancton y al krill. Al mismo tiempo, estos son la alimentación de pescados como el salmón o la trucha y de aves como el flamenco. ¿Y qué tienen todos estos animales en común? Efectivamente, su color entre rosado y anaranjado que proviene de este supernutriente.

Si por algo es conocido este supernutriente es por su potente actividad antioxidante, lo cual neutraliza los radicales libres que provocan daños en las células y ayuda a prevenir algunas enfermedades, como el cáncer, la aterosclerosis, la diabetes y la presión alta, entre otras.

Beneficios de la astaxantina

No cabe duda que la astaxantina destaca por sus potentes cualidades antioxidantes, pero, además, posee acción antiinflamatoria, antibacteriana, antitumoral, protectora de la salud cardiovascular y estimulante del sistema inmune. Aquí desarrollamos los principales beneficios de la astaxantina:

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1. Efecto antioxidante

La astaxantina natural es 550 veces más antioxidante que la vitamina E, diez veces más que los betacarotenos y mucho más efectiva que la vitamina C. Es un remedio increíble para luchar contra los efectos dañinos del estrés oxidativo. Es una importante captadora de radicales libres, incluso más que cualquier carotenoide como el B-caroteno y, a su vez, estimula la energía corporal.

2. Favorece la salud cardiovascular

La astaxantina protege las células del miocardio frente a los accidentes isquémicos , de tal forma que se protege también el sistema cardiovascular. También ayuda a disminuir los niveles de la proteína C-reactiva, que se produce por el hígado cuando hay inflamación en todo el cuerpo. Además, mejora el metabolismo de las grasas, fundamental en el perfil de una buena salud lipídica, lo que disminuye la producción de ateromas y la presión arterial.

3. Mejora el sistema inmunológico

Los antioxidantes ayudan a mantener la integridad de las membranas celulares, incluidas las del sistema inmune. Además, ayuda al mismo a detectar, identificar y destruir los microorganismos dañinos.

4. Contribuye a una mejora de la visión

Según las investigaciones del Dr. James Vallejo Quintero M.D, la astaxantina protege los ojos del estrés oxidativo al actuar como lo hacen los otros carotenoides: captura la actividad de los radicales libres frente a los tejidos de los ojos. Protege frente a la inflamación, porque disminuye la formación de lipo-polisacárido, que induce las inflamaciones, y mejora la visión a larga distancia, la agudeza visual, la percepción de profundidad y la fatiga ocular.

5. Mejora el estado de la piel

Como el resto de carotenoides, tiene una acción protectora en la piel frente las quemaduras solares y los daños del sol frente al ADN celular. Las quemaduras solares suelen conllevar procesos inflamatorios y la astaxantina también tiene estas propiedades antiinflamatorias.

Como efecto tópico se han realizado diferentes estudios donde se ha demostrado que la aplicación de astaxantina en cosméticos protegen la piel del daño solar, lo que mejora la apariencia, la producción de colágeno y evita, a su vez, la degradación del colágeno y reduce las arrugas.

6. Disminuye el colesterol

La astaxantina posee propiedades antiinflamatorias y antioxidantes que evitan la inflamación y oxidación de las células de grasa. Disminuyen así los niveles de colesterol LDL, el conocido como colesterol malo.

7. Previene la diabetes

Gracias a su actividad antioxidante, la astaxantina protege las células del páncreas contra posibles daños causados por los radicales libres. Así mejora el funcionamiento de la insulina y previene problemas como la diabetes y el síndrome metabólico.

Alimentos en los que se encuentra la astaxantina de forma natural

La astaxantina se produce de forma natural en las microalgas de agua dulce Haematococcus pluvialis y en el hongo de levadura Xanthophyllomyces dendrorhous. Cuando las algas se estresan por falta de nutrientes, aumento de la salinidad o exceso de sol, crean astaxantina y los animales que se alimentan de las algas, como el salmón, la trucha roja, el besugo, y los crustáceos (gambas, krill, cangrejos, langostas y cangrejos de río), reflejan posteriormente la pigmentación rojo-anaranjada de la astaxantina.

También puede encontrarse en algunas frutas como la papaya roja, una gran fuente de vitaminas y minerales que también es conocida por sus propiedades antioxidantes. Otra fruta que contiene astaxantina es la sandía, que no solo es baja en calorías, sino que también es rica en nutrientes y antioxidantes, entre los que se incluye la astaxantina. Por último, cabe destacar la presencia de astaxantina en los cítricos, especialmente en las naranjas y las mandarinas, pero también en los limones y en los pomelos. Además de ser ricas en vitamina C, estas frutas también contienen la importante astaxantina.

Por otro lado, algunas algas marinas, como la alga espirulina y la chlorella, también contienen una cantidad significativa de astaxantina. Estas algas son una excelente opción para aquellos que siguen una dieta vegetariana o vegana y que buscan una fuente de astaxantina en su alimentación.