Cinco entrenamientos fáciles y rápidos para cuando no tienes ni tiempo ni destreza

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Hacer ejercicio debería ser algo que hiciéramos como comer o dormir, es decir, de forma habitual y obligatoria. Pero nos lo solemos saltar porque estamos demasiado ocupados (seamos sinceros, cualquier cosa nos parece mejor que ponernos a ello) o porque tenemos dos pies izquierdos o ningún tipo de resistencia y hacer deporte se nos hace realmente cuesta arriba. Primero porque no vemos resultados a corto plazo y, lo segundo, porque nos cansamos más de la cuenta y eso termina frustrando. Pero no hay por qué ser un deportista de élite, podemos conformarnos con entrenamientos fáciles y rápidos que se adapten a todos.

Y sí, existen, y son la mejor forma de ponernos a hacer ejercicio cuando no lo hemos hecho antes o cuando no tenemos costumbre de hacerlo. Se trata de entrenamientos que nos llevarán solo unos minutos al día y que podemos hacer en cualquier lugar ya que, además, no necesitan que utilicemos casi herramientas complementarias más allá que nuestro propio cuerpo. Algo que supone también que sean muy económicos.

Así que, si estás pensando que ya es hora de empezar a hacer algo de ejercicio, aquí te dejamos cinco entrenamientos que van a ser claves para empezar. Porque sí, te va a ayudar con muchos aspectos de tu vida. Para empezar, según los diferentes expertos en psicología, el deporte, sea del tipo que sea, ayuda a combatir el estrés y la ansiedad, te motiva y mejora tu fuerza de voluntad, etc. Además, ayuda con los cambios hormonales y, por supuesto, a vernos mejor.

Correr

Salir a correr es el más sencillo y fácil de los entrenamientos que vamos a proponerte en este artículo. Y es que solo necesitas el tiempo del que tú puedas disponer. De hecho, hace unos días te contábamos que podías correr tan solo cinco minutos los días que salías a andar y que eso te serviría para tu bienestar tanto físico como mental.

Puedes hacerlo en cualquier sitio, así que no hay excusa si vas de viaje o si es fin de semana. Solo hay que encontrar un hueco en la agenda (es lo que hay que poner de nuestra parte), además de unas zapatillas que nos permitan correr cómodos.

Saltar a la comba

Lo hacías en el patio del colegio y ahora toca sacar al niño que llevas dentro porque la comba va a ser tu aliada. Se trata de un entrenamiento con el que harás mucho cardio y potenciarás la fuerza de tus piernas, pero también la de tu abdomen. Además, este ejercicio te ayudará a crear más resistencia y mejorar tu capacidad pulmonar a medida que lo vayas practicando.

Se trata de un ejercicio que solo te quitará diez minutos de tu tiempo y que puedes practicar día a día como ese momento exclusivo de deporte o también como complementario a otros deportes que practiques o a otros entrenamientos fáciles que te apetezca probar.

Natación

A pesar de que necesitas reservar un rato más largo para esto, es un entrenamiento muy sencillo, pues solo debes saber nadar o, como mínimo, saber mantenerte en el agua. Puedes hacerlo por libre o con un profesor, que te instruirá para que aproveches al máximo el tiempo que pasas en el agua. Además, el tiempo que suelen durar las clases de natación suele ser en torno a la media hora y puedes practicarla uno o dos días en semana.

Al igual que correr, te ayudará a liberar la mente, a relajarte y desconectar. Algo muy positivo si eres una persona que padece ansiedad o sufre estrés.

Patinaje en grupo

Lo habrás visto una y mil veces mientras paseabas por el parque de tu ciudad. Y es que, en estas zonas verdes de las ciudades es donde más se practican los deportes en grupo, y este es uno de ellos. No se trata de ser un patinador profesional ni artístico, dominando posturas y poses, sino de poder hacer ejercicio y desconectar de la rutina.

Si practicas un deporte en grupo, este momento también te servirá para socializar y ampliar tu círculo de amistades, con la cantidad de nuevas conversaciones y puntos de vista que ello conlleva. Disfrutarás mucho más del deporte al quedar con alguien para practicarlo y no ser algo que hagas tú solo.

Aerobic

Lo puedes hacer sin salir de casa. Enciende Youtube y haz clic en uno de esos vídeos de no más de diez minutos, que te invitan a trabajar una de las partes del cuerpo. Estos vídeos son entrenamientos guiados que puedes poner en el momento que más lo necesites o que mejor te venga. Apuesta por uno de los más completos, que incluyen saltos, sentadillas y abdominales. Es decir, una rutina completa que te ayude a ejercitarte al completo y que puedas tener como si fuera una meditación guiada cada día.