Cómo desarrollar tu creatividad para sentirte más joven: aprende a entender el Arte para cambiar tu vida

El hemisferio derecho del cerebro se asocia con la creatividad, el arte y el mundo de los sentimientos. El izquierdo, por su parte, con el análisis, la lógica o el desarrollo del lenguaje. Trabajar ambos hemisferios cerebrales ayuda a mantener activo el cerebro. Sin embargo, muchas veces, empujados por la rutina diaria, descuidamos nuestra creatividad. Sin embargo, trabajarla es una vacuna para tu salud mental y la felicidad.

En el libro Inteligencia artística. Aprende a identificar y desarrollar tu potencial creativo, Marisol Salanova, comisaria de arte y una de las críticas en la materia más destacadas del panorama español, enseña, precisamente, a desarrollar nuestra creatividad para sentirnos más felices y plenos. “Mi objetivo con este libro es hacer conscientes al mayor número de personas posible de lo mucho que puede ayudarnos la creatividad en nuestro día a día. Además, quiero facilitar que exploren sus capacidades”, explica Salanova.

La experta admite que “el mundo del arte es bastante opaco en cuanto a su funcionamiento. De modo que muchas personas desisten a la hora de emprender una carrera como artista o tienen la impresión de que cualquier trabajo creativo es inútil”. Por eso, ha tratado de poner luz en los procesos creativos. “Con este libro, contribuyo a arrojar luz sobre el ámbito artístico para cambiar de paradigma”, afirma. El resultado es un libro que engancha y despierta el gusanillo artístico.

Los beneficios de la creatividad

Según explica Salanova, “la creatividad es un mecanismo por el cual relacionamos ideas aprendidas y producimos ideas nuevas, conceptos originales. Forma parte del desarrollo de la inteligencia artística y puede aportarnos bienestar en nuestra vida, estímulos positivos y crecimiento personal”.

Estimular la creatividad conlleva numerosos beneficios. Entre ellos, ayuda a mejorar la autoestima y la conciencia de uno mismo, mejora la comunicación y la socialización, desarrolla la imaginación y hasta ayuda a enfrentarse a los retos. “Forma parte del desarrollo de la inteligencia artística y puede aportarnos bienestar en nuestra vida, estímulos positivos y crecimiento personal”, apunta la crítica de arte.

Pensamiento artístico para solucionar problemas

Algo súper curioso y útil en el libro Inteligencia artística es que ayuda a comprender que el pensamiento artístico nos puede ayudar a solucionar problemas. “Una de las técnicas de resolución de problemas consiste en redefinirlos, por ejemplo, al cambiar afirmaciones como «no es posible cumplir con las metas planeadas» por «alineemos esfuerzos para hacer realidad los objetivos»”, propone Salanova.

Para conseguirlo, comenta que “desde la inteligencia artística propondríamos algo más visual, porque, al ejercitar dicha inteligencia, surge de inmediato una imagen mental del problema que las palabras no siempre logran modificar. El lenguaje es poderoso, pero, ¿cuántas veces hemos oído eso de «vale más una imagen que mil palabras»? La primera persona que pronunció esa frase estaba ejercitando su inteligencia artística. Y, más significativo todavía, animaba a quienes la escuchaban a poner la suya en práctica”.

Utilizar las redes sociales para potenciar la creatividad

Una de las claves de Marisol Salanova es conseguir hacer el arte muy cercano y ameno. Algo que práctica también en sus redes sociales. Sus vídeos en TikTok o Instagram, con todos esos consejos sobre el mundo del arte, pero también sobre desarrollo personal y creatividad, son una buena muestra de ello. “Con ellos respondo a una necesidad. Soy muy activa en redes porque son una vía de comunicación muy efectiva”, apunta.

Para elegir temas, está pendiente de las necesidades que percibe entre artistas y sus seguidores. “Si veo que entre las cuentas de artistas se repite que no saben cómo presentarse a un concurso, grabo un vídeo explicándolo. Si sé que han salido unas ayudas para la producción o becas que pueda difundir, lo hago a través de TikTok, Twitter o Instagram”, cuenta. “Además, explico lo que hago, porque tampoco es usual que se sepa qué hacemos quienes nos dedicamos a la crítica de arte. Desmitifico oficios del sector y democratizo el acceso a la información, porque me parece lo justo”, resume.

La importancia del arte

Al leer a Salanova, da la impresión de que el arte es un revulsivo que puede revolucionar nuestras vidas. Y algo de eso admite que hay. “Cuando comprendemos que no tenemos por qué ser productivos la mayor parte del tiempo y nos dejamos llevar por la experiencia estética, se produce una pequeña revolución interior. Es un descubrimiento para el que no hay edad, género o nacionalidad. Cualquier persona puede apoyarse en el arte para cambiar su mundo”, anima.

Para lograrlo, la crítica de arte hace una llamada de alerta a un sistema que puede amputar la creatividad desde la infancia. “Sí, lo hace y podemos evitarlo si procuramos no generar creencias limitantes en los más pequeños. Desde la infancia recibimos mensajes sobre lo que es provechoso y lo que no, se cataloga todo lo artístico como inalcanzable”, afirma.

Por eso, progresivamente, nos alejamos de nuestro lado artístico. La crítica alerta: se pierde talento. “Gente que podría llegar a ser brillante creando arte ni lo intenta porque no se considera capaz. Tal vez, a raíz de que en el colegio le dijeran que no sabe dibujar, sin embargo tiene un don para esculpir o fotografiar”, asegura. Por eso, subraya que “es importante validar la creatividad y no ponerle fronteras”.

Todos somos creativos

Tendemos a pensar que hay que ser artistas para ser creativos, pero en su libro, Salanova deja muy claro que no es así. “Todos podemos llegar a ser creativos y desarrollar nuestras potencialidades en el entorno adecuado”, afirma. Y eso nos puede ayudar incluso a mejorar nuestra salud mental. “En estos momentos de crisis e incertidumbre sobre el futuro la inteligencia artística influye incluso a la hora de mantener una buena salud mental. No es necesario ser artista para disfrutar del arte y sus beneficios”, anima.

Cómo ser más creativo

Cuando le pedimos a Marisol Salanova alguna recomendación para liberar nuestra creatividad, contesta sin pensarlo: “No estancarnos nunca”.  Además, sugiere un ejercicio para desarrollar nuestra creatividad. “Un que propongo en mi libro es utilizar el recurso que bautizo como «La pizarra interior»».

Y añade: «Imaginamos en una pizarra dibujado nuestro objetivo ya logrado. Se trata de un ejercicio mental de visualización. La imagen de aquello que no sabemos cómo verbalizar puede ayudarnos a encontrar el camino hacia conseguir lo que queremos tirando de creatividad”, explica. Ya solo queda ponerse a ello y soltar nuestra imaginación.

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