El curioso truco para aliviar el estreñimiento con pompas de jabón que funciona

Tienes que comer bien. Seguir una alimentación saludable y equilibrada en la que no escatimes las verduras. Para, entre otros muchos beneficios, tomar el necesario aporte de fibra que promueva la regularidad de tu intestino y evitar que sufras estreñimiento. Aunque, llegado el caso, hay un truco tan sencillo como sorprendente para aliviar el estreñimiento. Sin tener que visitar una farmacia, sino una juguetería.

Kelly Peterson, fisioterapeuta especializada en el abordaje de los trastornos gastrointestinales y en la rehabilitación del suelo pélvico, explica que «hacer pompas de jabón es un ejercicio ideal para realizar durante la evacuación intestinal en caso de estreñimiento. Un ejercicio con el que tanto niños como adultos evitan forzar, empujar y contener la respiración, protegiendo así el suelo pélvico».

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No es únicamente una carencia o exceso de fibra. El estreñimiento también puede ocurrir por una hidratación deficiente, pues el agua hace que las heces sean más blandas y, por tanto, más fáciles de evacuar; y por la falta de ejercicio, pues como ha demostrado el Hospital Universitario de Copenhague, toda actividad física se asocia a una mejora de la motilidad intestinal.

Da igual. Con independencia de su causa y según ha observado el Hospital Universitario y Politécnico La Fe de Valencia, hasta un 29,5% de la población adulta de nuestro país, muy especialmente las mujeres, padece estreñimiento crónico. Un trastorno que, como alerta Kelly Peterson, «puede provocar la aparición de hemorroides, fisuras anales, prolapso rectal y obstrucción intestinal». Así que ha llegado el momento de poner fin a esta epidemia nacional. De llenar el aire de pompas de jabón.

Por qué el acto de soplar ayuda a aliviar el estreñimiento

En realidad, las pompas no tienen nada que ver. De lo que se trata es de soplar con suavidad. Para lo que también vale exhalar el aire para apagar una vela, inflar un globo o mantener un abucheo —»buuu»— o un mugido —»muuu»— sostenidos. Pues de esta manera también se facilita la relajación de los músculos del suelo pélvico y su coordinación con los músculos abdominales. Igual que ocurre en las sentadillas. Pero hacer pompas es más divertido.

Es una mera cuestión fisiológica. Cuando los músculos del core, especialmente los abdominales, se contraen en un esfuerzo para mover las heces a través del intestino, los músculos del suelo pélvico suelen contraerse de forma refleja. Cerrando el ano. Y de nada sirve empujar cuando el tapón está cerrado.

Coordinar la actividad muscular para favorecer el movimiento intestinal

Así que hay que soplar. Exhalar el aire de forma suave para, como indica la experta, coordinar la contracción del abdomen y la relajación del suelo pélvico. Además, esta exhalación provoca que la contracción de los músculos abdominales sea menos violenta que cuando se opta directamente por empujar. Sin respirar. Forzando que, ante tal exceso de presión, no sólo los músculos del suelo pélvico también se contraigan, sino aumentando el riesgo de padecer una hemorroide o un prolapso rectal.

Como apunta Kelly Peterson, «el diafragma juega un papel clave en la estabilidad el core y la respiración al controlar la presión intraabdominal. De ahí que se tan importante practicar la respiración diafragmática con la que mejorar la motilidad intestinal».

Distraer la mente es clave para aliviar el estreñimiento

Una razón más. Cuando se sufre de estreñimiento, ir al baño puede suponer un auténtico suplicio. Someter a los músculos abdominales a tanto esfuerzo sin lograr ningún resultado puede ocasionar, además de un intenso dolor, un gran estrés. Que hará que los músculos, incluidos los del suelo pélvico, se contraigan aún más. Haciendo que la evacuación resulte aún más difícil, cuando no imposible. Pero al hacer pompas de jabón, la mente se distrae, con lo que los músculos se relajan y se facilita la deposición.

Cómo prevenir el estreñimiento

Un último apunte: aun ciertamente útil, sobre todo en menores, este truco no es infalible. Y como todo lo que tiene que ver con la salud, cuando no con la vida, más vale prevenir que curar.

Como concluye la experta, «el proceso de evacuación de deposiciones debe completarse en unos pocos minutos, cuando no en segundos. Permanecer sentado durante cinco minutos ya es demasiado tiempo para el suelo pélvico. Lo que seguramente se deba a que no bebes suficiente agua, no tomas suficiente fibra o tu dieta no es equilibrada. O quizás sea porque necesitas hacer ejercicio para mejorar tu movilidad intestinal, por lo que es importante caminar todos los días 30 minutos».