Asterisco ticker noticias

NO TE PIERDAS Decidir entre lo que quiero y lo que debería querer: un drama en varios capítulos

X

El corte de digestión se produce por un cambio brusco de temperatura, como al entrar en agua fría tras comer. FOTO: Pexels.

Alimentación

Corte de digestión: lo que tus padres te advirtieron y lo que dice la ciencia

Ese temor ancestral a meterse en el agua con la barriga llena tiene base real, aunque no sea exactamente como te lo contaron.

Por Marcos López

24 DE JULIO DE 2025 / 07:30

Acabas de disfrutar de gazpacho, tortilla y filete empanado. El menú playero por excelencia. Es el momento de refrescarse con un buen chapuzón –¿quizá antes de una reparadora siesta?–. Pero tu estómago sigue en plena faena digestiva, como si estuviera en ebullición. ¿Puedes meterte ya en el agua o toca esperar? Seguro que recuerdas esas largas esperas de infancia junto a otros niños, obedeciendo a tus padres y sus advertencias sobre el temido, y siempre discutido, corte de digestión. Pero, ¿existe realmente o es sólo un mito?

La Dra. Katherine Bustamante, especialista en Aparato Digestivo del Hospital Universitario Hospiten Bellevue, lo tiene claro: no es tan simple. «El término corte de digestión no es del todo correcto desde un punto de vista médico. No es la digestión lo que se corta, sino que se produce un desequilibrio circulatorio».

TE PUEDE INTERESAR

Es un desequilibrio circulatorio, no digestivo

Después de comer, tu cuerpo concentra recursos en digerir y convertir la comida en energía. Para ello, aumenta el flujo sanguíneo hacia los órganos digestivos. Así que toca paciencia: dejar que el proceso avance sin forzar al organismo a desviar sangre hacia otros sitios, como la piel.

Según la Dra. Bustamante, «el corte de digestión ocurre por un cambio brusco de temperatura, como cuando entras en agua fría tras comer. El cuerpo desvía sangre desde el aparato digestivo hacia la piel para conservar el calor. Esto interrumpe temporalmente la digestión y puede provocar malestar, vómitos o incluso desmayos».

¿Cuánto tiempo esperar?

¿Entonces cuánto hay que esperar para bañarse tras una comida? Depende. Cada cuerpo digiere a su ritmo, y varios factores influyen. Pero hay consejos básicos para no jugársela.

La experta recomienda «esperar entre una y dos horas tras una comida completa. Si fue ligera, con 30 a 60 minutos suele bastar». Y ojo con la temperatura del agua: «cuanto más fría, más precaución», añade, remarcando que lo esencial es evitar bañarse con sensación de pesadez o sueño.

El corte de digestión: un mito centenario

Siempre ha habido una razón para que, rebosante la panza, tu infancia se llenara de interminables esperas para disfrutar de las refrescantes aguas de mares, ríos y piscinas. Nunca ha sido una malvada invención de los adultos para amargar el verano a los más pequeños. De hecho, los manuales de principios de siglo XX de los Boy Scouts estadounidenses ya alertaban del riesgo de sufrir un calambre paralizante en caso de someter al cuerpo a una (fría) inmersión tras una comida.

OTROS TEMAS WELIFE

Cuidado también con el ejercicio tras comer

Un apunte clave: el corte de digestión, o síncope por hidrocución, no es exclusivo del baño veraniego ni de duchas apresuradas tras una comida copiosa. Puede ocurrir en cualquier situación con un cambio brusco de temperatura.

La Dra. Bustamante concluye: «También pasa si haces ejercicio intenso justo después de comer, porque la sangre se desvía a los músculos y no al tubo digestivo, provocando síntomas similares. Además, cambios térmicos drásticos, como pasar de calor a frío, también lo desencadenan».

¿Has comido mucho? Deja que tu aparato digestivo trabaje sin interrupciones. O mejor aún, acompáñalo con una siesta veraniega, agradable y reparadora.

MÁS NOTICIAS

WeLife hoy

Sentadillas ejercicioCalmar estrésTipos de cansancioDopamina adicciónTortilla calor

Suscríbete a la Newsletter de WeLife para cuidar de tu cuerpo, tu mente y del planeta

Suscríbete a la Newsletter de WeLife para cuidar de tu cuerpo, tu mente y del planeta