Asterisco ticker noticias

NO TE PIERDAS Caminar 20 minutos al día favorece la creación de nuevas neuronas y mejora el rendimiento cognitivo, según un neurocientífico del CSIC

X
compra-evita-gimnasio

Ir a hacer la compra, recados u otras actividades del día a día son una actividad física que nos mantiene en forma./ Imagen: HBO Max.

EJERCICIO

Cómo hacer la compra te puede evitar apuntarte al gimnasio

O nos pasamos o no llegamos. Si queremos salir del sedentarismo y meter un punto de actividad física, nuestras actividades rutinarias pueden hacer por nosotros mucho más de lo que imaginamos.

Por María Corisco

04 DE OCTUBRE DE 2023 / 14:23

Que el sedentarismo es uno de los hábitos que más nos perjudican, y que la actividad física es beneficiosa para todos los aspectos de nuestra salud, tanto física como emocional es algo que todos tenemos claro. Pero muy a menudo pensamos que ponernos en marcha implica ir al gimnasio o lanzarnos al trote por las calles sin tener la más mínima idea de cómo correr sin lesionarnos. Si quieres empezar a moverte, puedes comenzar por entender que actividades como la compra, los recados o las tareas de casa pueden ser el primer paso.

Para que este primer paso nos lleve lejos, es importante entender “la diferencia entre actividad física, ejercicio y deporte -explica João Mota, fisioterapeuta y profesor en la Escuela Universitaria de Fisioterapia de la ONCE-. Nos equivocamos al pensar que si subimos unas escaleras hacemos deporte, y también al considerarnos activos si echamos un partido después de pasar muchas horas sentados. Por tanto, debemos empezar por entender cada concepto y, a partir de ahí, ver qué es lo más adecuado para nosotros”.

TE PUEDE INTERESAR
  • Actividad física: son todas aquellas cosas que requieren movimiento, salir del estado de reposo. Se basan, continúa el experto, “en decisiones que tomamos, como subir unas escaleras en vez de coger el ascensor; aparcar el coche lejos y caminar hasta llegar al trabajo o a casa, o coger nosotros mismos la compra en vez de que la cargue nuestro hijo, que tiene más fuerzas”. Es decir, se trata de sumar minutos de movimiento a lo largo del día, partir la jornada con estas pildoritas de actividad.
  • Ejercicio: el ejercicio supone un paso más, porque “implica un volumen, una métrica, unas pautas. Se hace una prescripción, unas repeticiones con un peso o con otro, etc.” Podemos hacerlo con sencillez en casa: coger una pesa y levantarla diez o 15 veces, por ejemplo.
  • Deporte: Sería el tercer paso. Por ejemplo, esa quedada para jugar al fútbol o ese partido de pádel del fin de semana. “Eso ya es deporte, pero es muy frecuente olvidar que, previo al deporte, debemos haber incorporado a nuestra vida la actividad y el ejercicio físico. Lo hacemos al revés y por eso son tan frecuentes las lesiones o que nos demos cuenta de que nuestra rodilla no está tan fuerte como debería y nos hagamos daño.

Tres pasos para ponerte en forma sin ir al gimnasio

Por tanto, si estamos en la fase inicial, la de que queremos tener una vida más activa, es importante seguir una secuencia lógica que ponga nuestro cuerpo, progresivamente, en funcionamiento. Y ahí es donde no vamos a necesitar el gimnasio ni machacarnos en ningún sentido.

OTROS TEMAS WELIFE
  1. Para incluir la actividad física en nuestra vida, pongamos la mente en la idea de “movernos todo lo que podamos a lo largo del día. Se trata de incorporar un poquito de dificultad a las tareas cotidianas. Por ejemplo, en vez de llamar al compañero en el trabajo, me levanto y voy a su mesa. Si me llaman por teléfono y no necesito tomar notas, cojo el teléfono de pie y paseo mientras hablo. Tomo la decisión de beber más agua y así iré al baño más veces”.
  2. Una vez que estamos en el modo on de actividad física, es el momento de empezar a plantearse hacer ejercicio. “No necesitas grandes cosas -explica Mota-. Uno de los mejores ejercicios es el de levantarse y sentarse en una silla. Es de los más básicos, un movimiento funcional que permite entrenar toda la musculatura de la extremidad inferior. Se trata de músculos grandes que, aparte de su función mecánica, tienen también una importante función endocrina. Y basta con hacer tres tandas de diez o 15 repeticiones”. En cuanto a las extremidades superiores, tampoco es necesario mucho equipamiento, “unas botellas de agua nos pueden servir como peso si las subimos por encima de nuestra cabeza y después las bajamos. Los ejercicios de los brazos se resumen en empujes y tracciones”.
  3. Finalmente, una vez que ya hemos despegado, “para maximizar tanto los resultados como el tiempo, es aconsejable optar por pedir ayuda de calidad, que va a ser lo que, finalmente, haga que nuestra decisión de ponernos en marcha sea verdaderamente costo-efectiva».
MÁS NOTICIAS

WeLife hoy

Peligros del plátanoObsesión con la glucosaEstoicismo y felicidadManifestiación conscienteCreencias limitantes

Instagram

Suscríbete a la Newsletter de WeLife para cuidar de tu cuerpo, tu mente y del planeta

Suscríbete a la Newsletter de WeLife para cuidar de tu cuerpo, tu mente y del planeta