Por qué disfrutar de la soledad es esencial para que tu pareja funcione

Si acabas de terminar una relación, o lo hiciste hace algún tiempo –sea el que sea–, puede que te anime saber que estás justo en el mejor momento para aprender a disfrutar más y mejor de tu soledad. Pero además, eso logrará que estés preparado para superar la ruptura, afrontar la llegada de una nueva pareja y ser más feliz con ella.

Para lograrlo, la psicóloga  y divulgadora sobre salud mental en redes sociales Elizabeth Clapés, muy popular en Instagram como @esmipsicologa, ha escrito Perderte para encontrarme (ed. Montena), una completa guía para superar tu ruptura y aprender a convivir contigo mismo. «He acompañado a muchas personas en procesos así y siento que es algo con lo que conecto de una forma muy bonita”, asegura. Porque todo lleva su tiempo, hay que seguir unos pasos y lo que hay que hacer para volver a disfrutar del amor es, primero, disfrutar de uno mismo.

Qué hacer tras una ruptura

Lo primero que deja claro la terapeuta es que no hay que olvidar que el dolor sana, que vas a estar bien, a reconstruirte y a florecer.

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Además, la propia ruptura tiene algo de positivo. Aunque sea un momento de vulnerabilidad máxima, también puede enseñarte muchas cosas de ti mismo, qué es lo que no deseas volver a permitir, lo que de verdad necesitas y, por puesto, a aprender a estar contigo.

Si acabas de romper con tu pareja, hay una serie de pasos a dar para superar la ruptura, según recomienda la experta. Para empezar, “lo primero sería quitar de tu vista –guarda, tira a la basura o devuelve–, todo aquello que sea suyo, vuestro o te recuerde a él o a ella”. Se trata de poner el lienzo en blanco para que te ayude a pasar página y moverte hacia delante, además de proteger tus emociones.

En esos primeros momentos, Clapés señala que también considera “fundamental el contacto cero, al menos durante un tiempo”. Es decir, “nada de hablar con tu ex pareja, salvo para lo estrictamente necesario”. Pero tampoco vale seguirle la pista en plan obsesivo. O sea, “ni buscar obtener información sobre su vida a través de terceros, ni de consultar sus redes sociales”. En realidad, lo que hay que hacer es centrarse en desprenderse, aunque cueste, y mucho.

Los beneficios de aprender a estar solo

Dicen que aprender a estar soltero y disfrutar de tu soledad es el primer paso para ser feliz con tu próxima pareja. Pero, para muchas personas, la soledad es un trago muy duro de pasar. Con ellas en la cabeza, la psicóloga Elizabeth Clapés decidió escribir Perderte para encontrarme. “Las rupturas son muy dolorosas y siento que están infravaloradas”, subraya.

En el libro, da muchas pautas destinadas a disfrutar de la soledad. Y explica por qué ello te prepara para poder tener una relación de pareja plena, con menos agobios y expectativas.

Por ejemplo, señala que es esencial “saber estar con uno mismo y disfrutar de ello”. Si lo hacemos, eso nos protegerá “de caer en relaciones de dependencia emocional o, incluso, de maltrato”. Pero además, la experta subraya que “si sabemos estar solos no nos quedaremos en una mala relación por miedo a la soledad” y recuerda que “está bien preferir tener pareja, pero que sea una preferencia y no una necesidad”.

Los peligros de acostumbrarte a la soledad

Por otra parte, puede ocurrir que cuando empiezas, al fin, a disfrutar de tu soledad, quizá ya no te planteas la posibilidad de vivir en pareja. La terapeuta confirma que esto ocurre con cierta frecuencia. “Me encuentro con muchas personas que, tras aprender a estar en soledad, tienen dificultades a la hora de volver a compartir su vida con una nueva pareja”, indica.

Sin embargo, no hay que tener miedo ya que, como resalta, “lo que suele suceder es que, como le hemos perdido el miedo a estar a solos, cuidamos más a quién dejamos entrar en nuestra vida y no nos cuesta alejarnos de quien nos genera malestar”.

Para quienes lleven un largo período sin pareja -cinco años, o más-, y comiencen una nueva relación, Clapés también da una serie de pautas para disfrutar del nuevo amor. “Hacerlo poco a poco y hablar con la otra persona para explicarle que es un proceso complicado en el que vamos a necesitar ayuda. Siempre con comunicación y responsabilidad afectiva, por supuesto”, anima.

Igualmente, quien acaba de terminar una relación amorosa, también necesita un tempo lento, sin sentirse arrastrado a una nueva pareja.

Cómo aprender a estar solo

Para lograr una conexión contigo mismo, si nunca has vivido solo y te asusta la idea, la terapeuta ofrece unas recomendaciones para que no se te haga tan cuesta arriba. Por ejemplo, “hacer acercamientos progresivos a actividades en soledad. Decorar tu hogar de forma que te sientas en casa. También invitar a personas que para ti sean espacios seguros y te ayuden a amueblar”, propone.

Otras de sus sugerencias consisten en “tratar de mantener tu entorno ordenado y limpio, planificar actividades relajantes y placenteras en casa… En resumen, sería convertir tu hogar en un lugar donde te guste estar. Tienes que cogerle cariño y para eso hace falta un trabajo”.

Lo que tienes que tener claro es que todo ese proceso tiene un fin: “Nos ayuda a tener relaciones en las que, pese a tener una pareja, existimos como individuos independientes de ella. Eso hace que tengamos espacios propios y no necesitemos hacerlo todo de la mano de alguien. Es muy sano».