Cómo sobrevivir a una ruptura: diez claves para pasar página cuando una relación se acaba

“Después de la separación, todavía queda por delante el trabajo del duelo y de la reconstrucción, el trabajo del olvido”. Con estas palabras, extraídas de su libro Me cuesta tanto olvidarte, la psicoanalista Mariela Michelena nos pone sobre aviso del camino que llega tras una ruptura amorosa. Uno en el que los atajos pueden ser peor que los rodeos y que cada uno de nosotros recorrerá con mayor o menor lucidez.

No es sólo el desengaño o el desamor, es también la necesidad de aceptar y asumir los cambios inherentes a esta nueva vida. Como nos explica Anushik Harutiunyan, psicóloga de Onelife Center, “las rupturas amorosas son siempre duras para ambos miembros de la pareja porque, aparte de la sensación de fracaso por la relación perdida y el no sentirnos queridos, siempre se producen cambios de rutinas y hábitos que nos exigen que nos adaptemos a nuestra nueva situación”.

Qué pasa cuando se rompe una relación

No descubrimos nada nuevo si decimos que el duelo por esta relación perdida puede ser más o menos llevadero en función de si esperábamos o no la ruptura, de si la deseábamos o, por el contrario, nos pone la vida del revés. “Habitualmente, la persona que rompe suele haber iniciado el duelo antes de separarse por completo, y la separación supone una primera fase de aceptación de que esa relación ya no funciona”, explica la psicóloga.

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Cuando rompen con nosotros sin que nos lo esperemos, “entramos en un estado de shock inicial y ponemos todo nuestro empeño en buscar las razones, o en intentar recuperar a la persona. Este suele ser un momento en el que evocamos todas aquellas cosas positivas que tenía nuestra relación”, añade.

Si entramos en este estado de shock, es fácil que nos quedemos paralizados, sin capacidad para mirar hacia adelante. “Tenemos que ser conscientes de que ese estado va a evolucionar, y no agarrarnos a la persona que ya no quiere estar con nosotros. Las rupturas indeseadas causan mucho sufrimiento y, si vemos que ese malestar es tan grande que no tenemos recursos para hacerle frente, debemos buscar ayuda, primero en las personas más cercanas y después ayuda profesional”, explica la experta.

En el proceso de duelo se pueden atravesar muchas etapas, de la incredulidad a la rabia, y de ésta a la tristeza, hasta llegar a la aceptación. “Aceptar que la persona con la que habíamos iniciado un proyecto vital ya no va a estar con nosotros y que debemos empezar a construirnos de nuevo solos puede ser muy costoso para algunas personas. Para que esto sea lo más llevadero posible, debemos rodearnos de personas que nos acompañen en el proceso e implicarnos en actividades diarias que sepamos que nos van a producir satisfacción”, puntualiza.

Qué es el contacto cero

Hasta no hace mucho tiempo, ante una ruptura podía ser habitual no volver a saber de la otra persona en mucho tiempo. Hoy, con la omnipresencia de las redes sociales, la cosa se complica y puede resultar muy tentador espiar la vida de nuestro ex.

“Cuando hay una ruptura es imprescindible una separación completa de la otra persona para poder reconstruirse uno mismo fuera de esa relación, reconectar con nuestros valores, nuestras aficiones y nuestro entorno. Tener en redes sociales información inmediata de lo que hace nuestra expareja suele interferir en nuestro desarrollo personal tras la ruptura, porque hace que de alguna manera sigamos vinculados a ella. Esto puede enlentecer nuestra reconstrucción, por ello es mejor, dentro de lo posible, darse un tiempo antes de tener a esta persona en redes sociales”, explica Harutiunyan.

Date tiempo antes de empezar una nueva relación

Durante el duelo puede surgir otra tentación, la de agarrarse rápidamente a otro clavo, aunque esté ardiendo. El miedo a la soledad, las ganas de revancha o la dificultad para vivir sin una pareja pueden hacernos correr tras una nueva relación. “Algunas personas son más rápidas que otras en encontrar pareja porque ya iniciaron el proceso de duelo dentro de la relación o porque necesitan un cambio o un entretenimiento nuevo.  Sin embargo, siempre que busquemos ese algo novedoso debemos ser conscientes de qué queremos y evitar buscar características de nuestra expareja en otras personas”, apunta la psicóloga.

Buscar a otra persona apenas terminada una relación puede ser un riesgo, indica la experta, porque “podemos intentar reemplazar a nuestra expareja por otra persona, buscar el mismo bienestar que teníamos con la primera y sin valorar a la persona que acabamos de conocer. Es habitual encontrar patrones de relaciones fallidas en las que las parejas tienen un perfil de personalidad parecido. Por ello, es importante tener ese tiempo después de una relación de reconstrucción personal antes de empezar una nueva relación sentimental”.

Trucos para hacer más llevadera la ruptura

Superar una ruptura sentimental puede ser un proceso emocionalmente desafiante, pero con el tiempo y el apoyo adecuado, es posible encontrar consuelo y seguir adelante. Aquí tienes algunos consejos para sobrellevar el duelo de una ruptura.

• Permítete sentir. Es normal experimentar una gama de emociones, como tristeza, enojo, confusión y miedo. Permítete sentir estas emociones y reconoce que son una parte natural del proceso de duelo.
• Busca apoyo. Habla con amigos cercanos, familiares o incluso un terapeuta. Compartir tus sentimientos puede ayudarte a procesar el dolor y sentirte menos solo.
• Establece límites. En los primeros días o semanas después de la ruptura, puede ser útil establecer límites claros con tu expareja para permitirte espacio emocional. Esto puede incluir limitar el contacto y las interacciones en las redes sociales.
• Cuida de ti mismo. Asegúrate de cuidar tu bienestar físico y emocional. Come de manera saludable, haz ejercicio y descansa lo suficiente. El autocuidado es crucial durante este período.
• Establece rutinas. La rutina puede proporcionar estabilidad emocional. Trata de mantener una rutina diaria, incluso si es simple, para ayudarte a mantener el equilibrio.
• Cuidado con la autocrítica. Analizar lo sucedido no implica necesariamente culparse por la ruptura. Las relaciones son complicadas y a veces no funcionan, pero eso no significa que sea forzosamente tu culpa.
• Aprende de la experiencia. Reflexiona sobre lo que aprendiste de la relación y la ruptura. Este autoanálisis puede ayudarte a crecer como persona y a tomar decisiones más informadas en futuras relaciones.
• Establece metas pequeñas. Ponte metas realistas y alcanzables para ti mismo. Esto puede ayudarte a enfocarte en el futuro y a recuperar un sentido de control sobre tu vida.
• Distrae tu mente. Encuentra actividades que te gusten y que te mantengan ocupado. Puede incluir pasatiempos, ejercicio, leer libros o ver películas.
• Ten paciencia. La curación lleva tiempo. No te apresures a superar la ruptura. Acepta que el proceso de duelo es individual y único