Cinco hoteles eco de lujo para pasar la Nochevieja y despedir el año por todo lo alto

Con el Atlántico de fondo y a pie de playa o entre viñedos mediterráneos atisbando las montañas, ¿se te ocurre un plan mejor para esta Navidad? Decirle adiós a 2023 puede ser la excusa perfecta para hacer una escapada de lujo en la que terminar el año relajado y empezarlo mucho mejor en espacios alejados del bullicio y el ruido de la ciudad. Y lo mejor, ganarte con la sorpresa a tu familia política o incluso a la propia.

Toma nota porque te ofrecemos la posibilidad de adelantar tu regalo de Reyes a Fin de Año con estos lugares mágicos y entrañables en los que recibir el 2024 en calma, armonía y en paz con el entorno. ¿Se puede pedir algo mejor?

Mas d’en Bruno (Priorat, Tarragona)

Energía solar, gestión óptima del agua (recirculación) y pozo propio, coches eléctricos y bicis ídem para moverse por el entorno… el cuidado del medioambiente y el alma eco están en el ethos de Mas d’en Bruno. Sólo se surten de proveedores locales. Están a punto de inaugurar huerto propio, de donde la cocina se abastecerá de verduras, frutas y aromáticas. Un hotel boutique en una masía del 1797 renovada sofisticadamente y rodeada de montañas y viñas en la tranquilidad del campo. Un oasis sostenible de lujo que celebra su primer Fin de Año con fiesta con música en vivo, uvas (¡del entorno!), cotillón y brunch de Año Nuevo (¡incluso con opción de superlate checkout a las 20.00 del día 1!). El menú de la noche del 31 lo realizará su joven y premiado chef Josep Queralt, que usará ingredientes locales y lo maridará con los mejores vinos del Priorat, producidos en los alrededores de la propiedad.

TE PUEDE INTERESAR

Entramos en el Royal Mansour, el oasis de lujo para desconectar del estrés en el corazón de Marrakech

Los mejores regalos para sorprender esta Navidad: desde libros hasta perfumes sostenibles

Fariones (Puerto del Carmen, Lanzarote)

Entre palmeras y jardines tropicales, a pie de playa y con acceso privado a una cala, adyacente a su zona de piscinas y solárium, Fariones es la mejor opción para los que buscan el verano en pleno invierno. La sostenibilidad (cuenta con varios premios al respecto) está en el alma de este ecohotel.

Su máxima expresión es la Finca de Uga. Una granja ecológica propia de 70.000 m2 que provee de las frutas, hortalizas, carnes, lácteos y hasta de premiados quesos que se ofrecen en el hotel. La oferta gastronómica es todo un lujo que va desde los yogures del buffet de desayuno hasta los ingredientes de los sofisticados platos de su restaurante Erizo, especializado en cocina de las islas atlánticas. Además, cuenta también con su premiado restaurante asiático Kaori, que propone un menú de fin de año diseñado por el chef Víctor Planas. ¿Vinos locales? El hotel cuenta con bodega propia: Stratvs. Después fuegos artificiales en la piscina y una gran fiesta de fin de año que contará con sesión de DJ en directo y gran cotillón.

Hotel Arzuaga (Quitanilla de Onésimo, Valladolid)

Placas solares para la generación de energía renovable, sistema de purificación con ozono y riego con agua de lluvia que permite el ahorro de agua es lo que le ha llevado al Hotel Arzuaga obtener el Certificado Verde de Iberdrola. La finca La Planta es el lugar donde se encuentra el huerto ecológico de 8.000 metros cuadrados que provee a sus restaurantes (entre los que se incluye El Taller, galardonado con una estrella Michelin) de gran parte de su materia prima, con decenas de especies de hortalizas y frutales. Además cuenta con (conocida) bodega propia y es el punto de partida perfecto para visitar la Ribera del Duero, los viñedos de la zona y sus parajes naturales. En Fin de Año proponen dos packs de planes: Reserva y Gran Reserva, que incluyen actividades enológicas, visitas guiadas, circuito termal, cena gastronómica y brunch de Año Nuevo.

Finca Serena (Montuïri, Mallorca)

Se sitúa en pleno campo en el interior de la isla. En un lugar recóndito y pacífico de gran belleza. Es una finca con olivares propios, viñedos y frutales de los que se surte su cocina. Finca Serena, como el resto de hoteles del grupo Único Hotels, cuenta con el programa WeCare que apuesta por energías renovables y su eficiencia, riego en el resort con agua regenerada y control de su gasto, vehículos eléctricos, cero plásticos y envases compostables, productos conscientes y sostenibles en su spa, viñedos, olivares (producen su propio aceite y vinos) y huertos 100% ecológicos…

El menú de fin de año tiene la firma del premiado chef Óscar Velasco. Como aperitivos, la corteza de calamar; la coca de anchoa y puré de higos secos; el consomé de ave, vino de Jerez y trufa negra. Como platos, el salpicón de marisco, apionabo y vinagreta de cítricos; la pasta rellena de pollo con sopa mallorquina y espinacas; el lomo de rape, cebollitas glaseadas, mostaza al vino tinto y por último la costilla de ternera al horno, cebolla, orejones y aceitunas de los olivos de la propiedad. No faltarán los turrones y dulces navideños. Todo regado con vinos premium y champagne. Cuenta con cotillones, uvas y baile con open bar en su invernadero.

Solo Palacio (Quirós, Asturias)

Solo Palacio es un complejo rural de lujo enclavado en un auténtico paraíso con espectaculares vistas al Parque Natural Las Ubiñas. Una construcción del S.XV que conserva todas las características de la arquitectura palaciega de campo asturiana. A través del proyecto Austere, canalizan todos los beneficios obtenidos para sufragar proyectos ambientales en la zona de Quirós.

Restauran y protegen ecosistemas naturales y vida silvestre, usan energía renovable, aplican sistemas de climatización e iluminación eficientes, utilizan productos de limpieza y amenities ecológicos, capacitan a su personal en prácticas de sostenibilidad y patrimonio de la cultura local, reducen el desperdicio de alimentos, ofrecen vinos de viñedos orgánicos y biodinámicos, venden o donan alimentos excedentes y realizan solo menús estacionales con productos de origen local. En Fin de Año la cena será creada por Estela Mancía (chef del restaurante de gastronomía asturiana La Senderuela) y no faltará el cotillón, las uvas, el cava, los cócteles y los dulces típicamente navideños.