Consejos y remedios naturales para combatir la retención de líquidos

La retención de líquidos o edema es un problema muy extendido entre las mujeres que notan cómo sus pies o sus piernas se hinchan. Esto genera una sensación de pesadez constante en todo el cuerpo, debido a que el organismo es incapaz de eliminar o depurar el exceso de agua de forma correcta. Es algo que puede suceder como consecuencia del calor, pero también por cambios hormonales, el sedentarismo o una dieta poco saludable, sobre todo por el consumo elevado de sal. Pero, según la Fundación Española del Corazón, también puede deberse a diversas enfermedades como problemas circulatorios, insuficiencia cardiaca congestiva, enfermedades renales o hepáticas.

Pero la retención de líquidos tiene solución y se puede combatir. La elección de alimentos diuréticos es clave para prevenir esta molesta sensación, pero no es lo único que puedes hacer. Los expertos en Nutrición de Club Metropolitan han recopilado una serie de hábitos que puedes incorporar a tu día a día para evitar la retención de líquidos.

1. Limita el consumo de sal

La sal tiene la capacidad de absorber el líquido en el cuerpo. Por tanto, cuando nuestra alimentación contiene un exceso de sal, se produce una retención de líquidos, puesto que se acumula agua en el organismo. Por eso, es fundamental moderar su uso, así como buscar alternativas más saludables para condimentar y dar sabor a nuestros platos, como por ejemplo especias. Por el mismo motivo, también es importante evitar los alimentos en conserva y los procesados.

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2. Hidrátate

Aunque pueda resultar contradictorio, beber agua nos ayuda a depurarla de nuestro cuerpo. Los expertos recomiendan beber dos litros de agua al día, tanto en las comidas como entre ellas para evitar los síntomas de las ingestas copiosas o con exceso de sal. ¿Te resulta difícil beber la cantidad de agua recomendada? Prueba con las infusiones o con el agua saborizada hecha en casa (las industriales contienen azúcares añadidos).

3. Toma infusiones

Lo que te decíamos, el agua siempre debería ser la primera de la lista para conseguir hidratarte pero si no eres capaz de tomar demasiada, puedes probar con las infusiones, unas grandes aliadas contra la retención de líquidos. No sólo por la hidratación que aportan, sino porque existen ciertas infusiones como el té verde o la cola de caballo. Gracias a sus principios activos, favorecen la diuresis, lo que ayuda a expulsar las toxinas acumuladas y reduce así la inflamación y los líquidos retenidos.

4. Modera el consumo de alcohol

La ingesta de alcohol debe ser reducida para evitar la retención de líquidos, especialmente en la zona del estómago y piernas. También provoca la acumulación de azúcar en el organismo, porque son calorías vacías (no aportan ningún nutriente beneficioso para el organismo). Pero todos sabemos lo difícil que es eliminar por completo el alcohol de nuestra dieta, sobre todo durante el buen tiempo, por lo que, si vas a consumirlo, es recomendable acompañarlo de agua para que el consumo sea menor.

5. Incorpora el deporte a tu rutina

Sí, todos sabemos que hacer deporte es saludable pero, además, lo realmente importante es acabar con el sedentarismo. Eso significa no pasar más de dos horas sentada en la misma posición, hacer pequeños descansos para estirar el cuerpo y descontracturarlo. Prueba a subir las escalera en lugar de usar el ascensor, ir andando a los sitios en lugar de coger el transporte público y usar la bicicleta en los trayectos más largos.

Alimentos que ayudan a eliminar la retención de líquidos

La alimentación es una de las claves para combatir la retención de líquidos. Estos son algunos de esos alimentos e ingredientes que tienes que incluir en tu menú para encontrarte mejor:

Perejil

El perejil, usado como ingrediente en algunos de tus platos, puede ayudarte a mantener un equilibrio saludable de líquidos gracias a sus compuestos como el apiol y la miristicina que tienen efectos diuréticos.

Sandía

La sandía tiene un alto contenido en electrolitos, un 92% de agua y fibra, así como propiedades diuréticas, con lo que ayuda eliminar el exceso de líquidos. Además, contiene citrulina, que mejora la función vascular y reduce la presión arterial.

Alcachofa

Algunos de los componentes de la alcachofa, como la cinarina, favorecen la función renal y ayudan a eliminar toxinas. Así se previene la retención de líquidos, la hipertensión y el exceso de ácido úrico. Además, es muy beneficiosa para cuidar nuestro hígado, favorece la función biliar y nos ayuda a quemar grasas.

Apio

Compuesto por un 95% de agua, el apio es un vegetal altamente depurativo gracias a su aceite esencial, que dilata los vasos renales y favorece la eliminación de agua y sustancias tóxicas a través de la orina. Además, acelera la digestión, elimina los gases y, aunque es un alimento altamente saciante y con gran contenido en fibra, aporta poquísimas calorías.

Limón

El limón es uno de los frutos con más alto contenido en vitamina C, que ayuda a reforzar el sistema inmunológico. Tiene componentes anticancerígenos, además de ser un poderoso antioxidante. Además, es altamente diurético y depurativo, por lo que es una buena ayuda para eliminar líquidos y sustancias tóxicas retenidas en el organismo.

Espárragos

Compuestos por un 90% de agua, los espárragos contienen un aminoácido llamado asparagina, un diurético natural que, además de ayudarnos a eliminar líquidos y favorecer el funcionamiento renal, también consigue que nos deshagamos del exceso de sales mediante la orina. También aportan saponinas, un fitoquímico que potencia su efecto diurético. Además, gracias a su contenido en fibra soluble, ayuda al tránsito intestinal y favorece la quema de grasas.

Melón

El melón es una gran fuente de potasio por lo que tiene unas propiedades altamente diuréticas, además de regular la cantidad de sodio de nuestro organismo, por lo que te ayudará a sentirte menos hinchada.

Pepino

El pepino contiene un 95% de agua y es muy refrescante. Además de ser muy diurético, es rico en antioxidantes, que aportan flavonoides, vitamina C y betacarotenos, que ayudan a prevenir enfermedades cardiovasculares, y vitaminas del grupo B, que alivian la ansiedad y reducen algunos de los efectos dañinos del estrés.

Piña

Comerla facilita la digestión, sobre todo de las proteínas, debido a su riqueza en bromelina. Es una buena fuente de vitamina C y potasio, por lo que sus propiedades diuréticas son excelentes. Además, es muy nutritiva, baja en calorías y grasas y aporta fibra, por lo que es un alimento saciante.

Puerro

Este vegetal de escaso contenido calórico tiene unas propiedades altamente depurativas y diuréticas gracias a su riqueza en potasio. Además, es saciante, gracias a su contenido en fibra dietética, y una buena fuente de vitaminas, especialmente C, E y B6, así como de carotenos y ácido fólico.