Por qué el sexo sincronizado es la clave para mejorar tu relación de pareja (y tu salud)

Estáis hechos el uno para el otro y hacéis siempre todo juntos. Como un equipo. De hecho, estáis tan compenetrados que un pequeño gesto o mirada basta para comunicaros y saber qué pensáis. Y cuando salís a caminar para beneficiaros del sinfín de efectos positivos que todo ejercicio tiene para la salud, marcháis siempre al unísono. Una sincronía de la que también disfrutáis en vuestros encuentros íntimos. Lo que, como ha demostrado la ciencia, es muy bueno tanto para vuestro cuerpo como para vuestra relación.

No es únicamente cuestión de alcanzar el clímax al unísono. Se trata de que los movimientos de vuestros cuerpos estén perfectamente coordinados, de que los corazones latan a la vez, de que las respiraciones, cada vez más aceleradas, se acompasen. En definitiva, de que el sexo, totalmente sincronizado, fluya.

La doctora Florencia Salort, ginecóloga y Sex Coach, explica que «el que los dos miembros de la pareja tengan que llegar al orgasmo al mismo tiempo es un mito. El placer y la conexión van más allá de la sincronización. Cada cuerpo es único y experimenta el placer a su propio ritmo».

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Cuanto mayor sea el vínculo, mayor será la sintonía

Va mucho más allá del sexo. La sincronía fisiológica o sintonía está por todas partes. ¿El latido de tu corazón se ha acelerado? El de la persona que tienes al lado, como constata la Universidad de Zúrich, también lo hará. Y lo mismo sucede, entre otros muchos ejemplos, con la respiración. Lo que no quiere decir que, una vez en la calle, todo el mundo vaya, cual robots, a coordinar sus movimientos y funciones corporales. Debe existir un vínculo, y cuanto más fuerte sea, mayor será la sintonía. Como sucede en las parejas.

Fortalece la relación

Además, esta simultaneidad fisiológica no se reduce únicamente a la interacción entre seres humanos. También es una respuesta común, según ha observado la Universidad del Estudio de Milán, en las mascotas. Da igual. Son numerosos los estudios que, como el de la Universidad de Rhode Island, han demostrado que esta sintonía potencia la empatía, el sentimiento de cercanía y el bienestar de la relación. Dicho de otro modo, cuando dos allegados sincronizan sus cuerpos mejoran su conexión. ¿También en el caso de las parejas? Sí.

Incrementa la satisfacción sexual

La sintonía favorece la plenitud sexual en la pareja. Según ha revelado la Universidad de Texas en Austin, cuanto más compenetrados están los amantes en su vida cotidiana, mayor es su satisfacción sexual. Una curiosidad: el estudio también ha hallado que son las mujeres las que suelen acompasar los latidos de sus corazones a los de sus compañeros varones. Y esta sincronía fisiológica, ¿también es beneficiosa cuando se traslada al lecho?

El contacto físico aumenta la sintonía

En su nuevo estudio, los investigadores texanos midieron el nivel de sincronía de los corazones de 58 parejas en diferentes situaciones: estando en habitaciones separadas; mirándose cara a cara sin tocarse; tratando de imitar, y anticipar, los gestos faciales que haría su compañero; cogidos de la mano; disfrutando de sus juegos preliminares; realizando el acto sexual en una posición en la que, tumbados de costado, mantenían siempre el contacto visual; y practicando sexo libremente mientras seguían mirándose a los ojos.

Los corazones laten totalmente sincronizados

Una vez más, los corazones de los participantes se sincronizaron con los de sus parejas. Salvo en dos excepciones: cuando mantenían un tabique de por medio o tuvieron que adoptar una postura predeterminada en su encuentro íntimo. Y cuando mayor simultaneidad alcanzaron sus palpitaciones, llegando sus corazones a latir como una unidad, fue durante su acto sexual libre y natural. Como recuerda la doctora Salort, «la diversidad es lo que hace que nuestra sexualidad sea hermosamente auténtica».

La mayor conexión emocional amplifica el placer

Pero va mucho más allá de los corazones. Las respiraciones y movimientos corporales sincronizados favorecen la relajación de los amantes, que pueden disfrutar en mayor medida de los beneficios, tanto emocionales como relacionales, de su encuentro sexual. O dicho de otro modo, su sintonía amplifica el placer y la satisfacción sexual. Calidad, que no cantidad. Y es que como concluya la experta, «es completamente falso que la frecuencia sexual defina una relación plena. La calidad y la conexión emocional importan mucho más que la cantidad de encuentro íntimos».