El calor, la deshidratación y las caídas de los niveles de azúcar son algunas de las principales causas de las jaquecas asociadas al ejercicio. La buena noticia es que son muy fáciles de prevenir.
Este sencillo ejercicio japonés es muy útil para corregir la postura corporal, lo que además de aliviar tus dolores de espalda te ayudará a lucir un vientre plano. Con sólo una toalla y en cinco minutos.
Dedicar 30-40 minutos a la práctica de ejercicio moderado, como sería caminar a buen paso, contrarresta muchos de los efectos negativos de pasar diez horas sentado.
La nutricionista Carla Romagosa defiende que la alimentación combinada con ejercicio puede tener la llave para acabar con los sofocos o el insomnio. Estas son sus pistas para conseguirlo.
Dado que son sometidas a un proceso de congelación inmediatamente posterior a su cosecha, las verduras congeladas pueden tener un mayor valor nutricional que las frescas.
La cantidad de tiempo que duermas es importante, pero lo es más la calidad del sueño, para lo que es crucial tener unos horarios de sueño estables.
Pequeñas ráfagas de actividad física intensa de uno o varios minutos de duración repartidas a lo largo del día ayudan a mantenerse en forma y contrarrestan los perjuicios del sedentarismo.
Rebautizado como el elemento de la longevidad, este mineral esencial tiene un potente efecto antiinflamatorio y reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Limitar el número de respiraciones a un máximo de seis por minuto te ayudará a relajarte rápidamente sin perder la concentración, mejorando así tu rendimiento cognitivo.
El romero aumenta entre un 60% y un 75% las probabilidades de recordar diversas cosas de nuestro día a día, lo que se conoce como memoria prospectiva.
De la salud al bienestar mental o la sensación de libertad, son muchos los motivos que conducen a despedirse del alcohol. Una sobriedad escogida por la que apuestan cada vez más personas.