Zumo de arándano, el superalimento que reduce la inflamación y potencia tus defensas

Tienes que beber para calmar tu sed e hidratarte. Para reponer los líquidos perdidos por el calor y el ejercicio. Y después de tanto vaso de agua, buscas una alternativa que aporte sabor a tu vida y te llene de energía. Así que optas por deleitarte con un zumo. Y entre la gran variedad de frutas que tanto bien le hacen a tu salud, ¿por qué no decidirte por los arándanos rojos? Te contamos el sinfín de beneficios que el zumo de este superalimento puede hacer por ti.

Es cierto que no es bueno abusar de los zumos, muy especialmente de los envasados, por su alto contenido en azúcares. Pero como explica dietista-nutricionista en el Consultorio Médico Los Ángeles de Madrid, «es totalmente seguro tomar un vaso al día de zumo de arándanos como parte de una dieta sana y equilibrada».

Reduce la inflamación

Los arándanos son muy ricos en un grupo de compuestos vegetales, los polifenoles, que protegen a las células del estrés oxidativo causado por los radicales libres. O lo que es lo mismo, reducen la inflamación crónica que contribuye al desarrollo de enfermedades muy graves como las cardiovasculares y pulmonares, la diabetes o diversos tipos de cáncer.

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De hecho, la Academia de las Ciencias de China ha constatado el efecto antioxidante, antiinflamatorio, antienvejecimiento, anticancerígeno y antimicrobiano de los polifenoles.

Exprime tus arándanos

Pero esta «riqueza» en polifenoles de los arándanos, ¿no se pierde tras pasar por el exprimidor? Pues no. Es cierto que, como revela la Universidad de Quebec, el contenido de estos compuestos es algo mayor antes de que el fruto haya sido prensado. Pero no importa. Como destaca Prue Mynard, especialista en Dietética y Nutrición, «el zumo de arándanos también es una fuente rica en polifenoles antioxidantes».

Potencia tu sistema inmune

Comparados con otras frutas, los arándanos y su zumo ofrecen un alto contenido en un tipo de polifenoles, las proantocianidinas, que potencian la acción del sistema inmune frente a todo tipo de patógenos invasores. Tanto virus, como ha observado la Universidad de Tennessee, como bacterias, e inhibe el crecimiento de hasta siete tipos diferentes, según los investigadores de Quebec. Y a ello se suma su riqueza en vitamina C, que como demuestra la Universidad de Maastricht juega un papel esencial para un adecuado funcionamiento de los glóbulos blancos.

Previene las infecciones de orina

Es más, Prue Mynard apunta que «gracias a sus propiedades antibacterianas, el zumo de arándanos es una opción excelente para las personas que sufren infecciones del tracto urinario».

Una de las bacterias frente a las que actúan las proantocianidinas es la «Escherichia coli», cuya colonización en las paredes de la vejiga y de las vías urinarias, según muestra la Universidad de Copenhague, es responsable de la mayoría de estas infecciones que obligan a los afectados a visitar continuamente el aseo.

Protege tu sistema circulatorio

Los arándanos –y su zumo– también contienen otro tipo de polifenoles, los flavonoides, que protegen al corazón, y a todo el sistema circulatorio, frente al daño oxidativo.

De hecho, el zumo de esta fruta no sólo reduce los niveles de colesterol malo, tal y como refiere la Universidad de Norwich, y de presión arterial, como muestra el Centro de Investigación en Nutrición Humana de Beltsville.

También, según la Universidad de Dusseldorf, disminuye el riesgo de acumulación de placas en los vasos sanguíneos, o lo que es lo mismo, de desarrollar la temida aterosclerosis.

Mejora la salud digestiva

¿Necesitas más razones para disfrutar del zumo de arándanos? Pues como refiere Prue Mynard, «también es una fuente de fibra prebiótica, que alimenta a las bacterias buenas que conforman la microbiota y, así, ayudan a optimizar la salud intestinal».

Pero su beneficio para el tracto digestivo no acaba aquí: otra de las bacterias cuyo crecimiento se ve inhibido por las proantocianidinas es, como concluye la Universidad Yonsei de Seúl, el «Helicobacter pylori», causante de las úlceras pépticas.

Un vaso al día es más que suficiente

Así que ha llegado el momento de deleitarse con este zumo rojizo. Sin abusar. Y es que dada su naturaleza ácida, advierte Rocío del Pozo, «puede provocar malestar estomacal y diarrea en caso de ser consumido en grandes cantidades».

También por su elevado contenido en azúcar, común a todos los zumos envasados. De ahí que sea tan importante leer las etiquetas y evitar los que contengan azúcares añadidos. Cuanto más natural, mejor.