Cómo confiar en alguien al que empiezas a conocer cuando todas tus relaciones han fracasado

En medio de las numerosas formas para conocer gente nueva y enamorarte de verdad, también se esconde por el camino más de un desengaño amoroso. Esto conlleva dolor y tristeza y, en algunas ocasiones, se puede traducir en una gran desconfianza a la hora de conocer a alguien. Además, las prácticas como el ghosting o el curving también son algunas de las responsables de que cada vez sea más complicado abrirse y estar dispuesto a enamorarse. Frente a ello, los psicólogos advierten de que la reconstrucción de la confianza requiere tiempo, paciencia y trabajo y, para ello, se pueden seguir una serie de pasos que te ayudarán a reforzarla.

«A veces nos cuesta confiar porque nos han herido previamente. Otras porque la persona no nos muestra lo que necesitamos o esperamos para sentirnos seguros y, por tanto, poder confiar», explica María Ros, psicóloga y escritora. Sin embargo, la confianza es algo que se genera poco a poco y, si se cuida, puede hacer perdurar una relación. El primer paso, según asegura Belén Colomina, psicóloga y experta en meditación, «es sentirse abierto a la relación y curioso a descubrir lo nuevo».

Pon de tu parte

Pero conseguir esa confianza plena no es tan fácil como parece. Para llegar a ese punto, Andrea Bonior, psicóloga clínica de Phycology Today, recomienda estar dispuesto a esforzarse en este proceso. Esto es todo lo que puedes hacer para crear confianza con la persona a la que estás empezando a conocer.

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No sólo basta con que la otra persona sea la que te demuestre esa confianza. Se trata de algo que se tiene que cultivar por ambas partes y para ello, puedes empezar por ponerlo en práctica tú mismo.

Cumple tu palabra

Hacer lo que dices que vas a hacer es una de las bases fundamentales para que haya confianza. Según explica la psicóloga Bonior, «si estás buscando incrementar la confianza dentro de una relación, es importante que dejes de decir cosas que no vas a cumplir, o que no representan tus sentimientos reales».

Además, esta también es una buena manera de reconocer las señales que te indican si puedes confiar en alguien o no. Si la persona que estás empezando a conocer cumple con su palabra, quiere decir que ya tienes un punto a favor para darle tu confianza.

Recuerda la importancia del respeto

«Una de las formas en la que nuestras parejas pueden dañarnos emocionalmente de forma duradera es menospreciándonos», advierte Bonior. El respeto debe ser el dominador común en cualquier tipo de relación y este también es un paso fundamental para construir la confianza. Y según explica la psicóloga, cuanto más emocionalmente íntima sea la relación, más importante debe ser ese nivel básico de respeto. Se trata de algo que es necesario saber reconocer cuando comienzas a conocer a una persona y que debe mantenerse durante toda la relación.

Expresa tus sentimientos funcionalmente

Expresarle tus sentimientos a la persona con la que estás saliendo «significa que sabes que hará tiempo para entender tu punto de vista, no para anularlo», defiende la psicóloga. Para ello, también es necesario hablar de los sentimientos más difíciles o incómodos para aprender a hablar de emociones desafiantes sin que haga falta comenzar un conflicto. Esto, además, ayudará a potenciar la confianza entre ambas partes y a conocerse mejor. Según explica Bonior, para llegar a crear confianza con alguien también debes darle la oportunidad a esa persona de conectar con tu verdadero «yo» y eso incluye todas tus emociones.

Cultiva la reciprocidad

Otra de las bases de la confianza en una relación es estar dispuesto a dar y recibir. Según menciona Bonior esto es necesario para una relación sólida. Esto no significa que debas dar exactamente lo que recibes o que la implicación de la otra persona en la relación deba ser exactamente la misma que tienes tú. Se trata de que ambas partes se sientan cómodos con estos niveles, y se sientan relativamente iguales. Es una forma de crear un equilibrio en la pareja y además, una manera de generar una confianza suficiente en la que no das por recibir nada a cambio.