Beatriz Larrea: «No se trata de cuándo vas a morir, sino de cómo vas a vivir»

«Una alimentación con un poco de todo, que nos dé paz y con la que construyas hábitos saludables es lo mejor para la pérdida de peso y para un mayor bienestar a corto y a largo plazo». Esta es una de las afirmaciones que Beatriz Larrea, nutricionista y dietista especializada en alimentación holística, hace sobre el envejecimiento biológico. Larrea cuenta con una amplia trayectoria en la investigación sobre métodos de bienestar flexibles que rompen con las dietas milagro y se centran en los hábitos saludables a largo plazo. Fruto de este estudio es su nuevo libro Apaga tu cuerpo en llamas en 30 días (Ed. La esfera de los libros), que ya puedes conseguir a través de las webs de Amazon, La Casa del libro, El Corte Inglés o Fnac.

Este nuevo libro es la segunda parte de su best-seller, Tu cuerpo en llamas. Esta vez, la nutricionista, que también nos acompañará en el próximo Mercedes-Benz WeLife Festival, que celebraremos el último fin de semana de octubre, se centra en aportar consejos prácticos sobre cómo combatir la inflamación y corregir el metabolismo para ser más longevos. Y no sólo ganar años de vida, sino ganar calidad de vida en los años, que «es lo realmente importante y esto se construye gracias a la flexibilidad», asegura la experta en una entrevista para WeLife. Larrea nos ha contado cómo nació su interés por la nutrición holística, dónde está el gran fallo de las dietas y todas las claves para aprender a construir hábitos a largo plazo.

¿Por qué nace tu interés por la nutrición holística y los hábitos saludables?

Yo vivía en Nueva York, estaba haciendo un máster en Relaciones Internacionales y lo quise enfocar al medio ambiente. Me di cuenta de que la manera de alimentarnos también tenía un impacto medio ambiental. Al acabar el máster me puse a trabajar en Wall Street y tenía mucho sobrepeso, acné, inflamación, estreñimiento, pesaba 20 kilos más lo que peso ahora y toda mi vida me la pasé a dieta con nutricionistas, con dietas milagro…

La realidad es que en la ciudad de Nueva York estaba empezando esa moda de los superalimentos, los zumos y los batidos saludables. Y simplemente, por interés de hacer lo mismo que hacían los demás, empecé a tomar este tipo de alimentos y, con el tiempo, me empecé a sentir tan bien, que dije: «qué es esta maravilla».

Ahí fue cuando estudié la primera certificación como health coach y me empezó a apasionar todo el tema de nutrición. Ya llevo 15 años investigando sobre esto. Esto hace 15 años no existía, estaban los nutricionistas de toda la vida, pero ninguno te daba un enfoque diferente como este.

En el libro hablas sobre el envejecimiento biológico, ¿por qué crees que es importante aprender a retrasarlo?

En todas las investigaciones que tenemos en los últimos años sobre el mundo antiaging nos dicen que lo que se busca es un enfoque para retrasar el envejecimiento biológico. ¿Por qué queremos retrasarlo? Porque con el envejecimiento viene la enfermedad y, con ella, la disminución de la calidad y la cantidad de años de vida posibles con vitalidad y exentos de enfermedades degenerativas.

No se trata de cuándo vas a morir, sino de cómo vas a vivir. La medicina ha avanzado tanto que te van a mantener vivo con un Alzheimer o con un cáncer y lo que pasará en 30 años no lo sabemos. Se trata de cómo vas a vivir tu día de hoy, de construir una autoestima a través de la alimentación y un estilo de vida saludable, de sentirte con energía y tener un cuerpo y una mente ágil. ¿De qué te sirve morir en vida? Hay que ayudar a las personas a que construyan la mejor versión de sí mismas.

¿El envejecimiento biológico se puede revertir?

¡Claro! Hay muchas investigaciones sobre esto. Empiezas a notar cambios desde el momento en el que comienzas a practicar un estilo de vida saludable. Constantemente estamos moviendo las aguas de nuestro envejecimiento para adelante o para atrás dependiendo de lo que comemos, lo que bebemos, lo que pensamos, el ejercicio que hacemos o incluso cómo soñamos. Nunca está estático.

¿Qué ocurre si a este proceso le sumamos la inflamación?

Es importante saber diferenciar entre distensión abdominal (hinchazón), que esto es un problema gastrointestinal, y la inflamación de la que yo hablo en mi libro. Por inflamación, en general, entendemos una activación del sistema inmunológico por algún estrés. Puede ser crónico  o agudo. Es importante modular ese sistema inmunológico para que nos defienda.

¿Si no sabemos reducir esta inflamación puede derivar en enfermedades graves?

Sí. Sabemos que todos los signos del envejecimiento tienen un componente de inflamación. Si queremos retrasar el envejecimiento biológico, primero tenemos que modular esa inflamación. Tenemos que centrarnos en el crecimiento, en rejuvenecer, en desintoxicar… pero para eso primero debemos regular nuestras defensas.

¿Qué hábitos saludables practicas tú?

Yo siempre represento a la salud como una mesa. Digamos que esa mesa tiene siete patas, y esas siete patas le van a dar estabilidad a la mesa. Si tú le quitas una pata, puede ser que esa mesa se sostenga; si le quitas dos, esa mesa no se va a sostener; y si ya quitas tres, olvídalo, tu mesa se cae.

¿Qué quiero decir con esto? Que de esas patas, no hay una que sea más importante que la otra. La alimentación no es la panacea de la salud. Tú puedes comer perfectamente, pero si estás estresada, amargada, deprimida y no duermes, tampoco vas a alcanzar tu potencial en salud, esa mesa se va a caer. Por lo tanto, hay que construir todas esas patas que le van a dar estabilidad a tu cuerpo y a tu bienestar.

¿Cuáles son esas patas?

Tenemos el deporte, el sueño, la genética… Tenemos uno que, probablemente, es el más importante de todos: la gestión del estrés porque es el mayor pirómano que tenemos. Tenemos también la alimentación, las emociones, la comunidad, la sensación de sentirnos parte de algo, de no sentirnos solos, un propósito de vida. Y ninguno es más importante que otro. Por eso, en mi libro hago un enfoque integral donde te ayudo a construir hábitos sanos en cualquiera de estos ámbitos. Tú tienes que pensar qué es lo que es lo que más te falla para ir trabajando sobre ello. Es importante construir hábitos a largo plazo.

Yo siempre les digo a mis clientes que lo primero que deben hacer es una lista de cosas que saben que no están haciendo bien y, a partir de ahí, atacar semana a semana cada uno de estos hábitos. Es ir construyendo poco a poco. Si lo hacemos todo a la vez, te vas a acabar frustrando. La construcción de hábitos saludables viene de la mano de la flexibilidad. Ese es el gran fallo de las dietas, que son rígidas e inflexibles y no se pueden sostener.

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