Así tiene que ser tu crema de cuerpo para cuidarte durante la menopausia

Entre las decenas de síntomas que puede provocar la menopausia, los de carácter estético ocupan un lugar destacado. Sabemos que la combinación de edad y descenso de estrógenos se convierte en un enemigo de la piel del rostro. O del pelo. Pero ¿quién se acuerda de la piel del cuerpo? Si bien, cada vez nos gastamos más en cosmética corporal (según Stanpa, la mayor parte del consumo en belleza se concentra en fórmulas para rostro, cuerpo y protección solar), no le prestamos la misma atención que a la que usamos en la cara. Sin embargo, adaptar las cremas de cuerpo a momentos específicos como la menopausia resulta fundamental para darle a la piel lo que realmente necesita.

Para empezar, es importante tener en cuenta la pérdida de colágeno (y de elastina). Ya que ésta no afecta sólo al rostro. El hecho de que esta proteína disminuya hasta un 40% durante la menopausia se refleja también en mayor flacidez en la piel de los brazos, los muslos o el abdomen. Además de esa falta de firmeza, se traduce en una textura menos suave y menor elasticidad. En este sentido, interesan ingredientes que sean capaces de aportar colágeno o, mejor aún, de activar su síntesis, así como soluciones de efecto reafirmantes.

Piel más seca y descamada

Otro aspecto fundamental es la sequedad. Con los cambios hormonales, las glándulas sebáceas, productoras del aceite natural de la piel, también disminuyen su actividad. Esto puede conducir, además de a una piel más seca, a sufrir descamación, sensación de tirantez e, incluso, a la aparición de irritación o grietas. Por todo ello, las cremas de cuerpo en menopausia deberían ir más allá de una hidratación superficial. Las texturas más ricas y las fórmulas que nutren además de hidratar. ¿Activos interesantes? Las ceramidas, el ácido hialurónico, mantecas como la de karité, extracto de espino amarillo…

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Asimismo, hay que tener en cuenta que la función barrera suele verse comprometida antes y durante la menopausia. Los principales responsables son una epidermis más delgada y frágil, y una renovación celular más lenta. El hecho de que las grasas –o lípidos– rebajen su actividad tampoco ayuda. Las cremas de cuerpo formuladas para pieles maduras no olvidan este punto. Por tanto, suelen incluir activos reparadores y calmantes, así como otros capaces de equilibrarla para recuperar su estado óptimo. Por último, resulta más que interesante que el cuidado corporal contenga ingredientes antioxidantes con acción protectora frente a las agresiones externas. No quedan dudas, por tanto, de que la menopausia es un buen momento para renovar la crema de cuerpo. Aquí van algunas opciones interesantes.

Crema de cuerpo Beauty Secrets of Cleopatra, de Alma Secret

De efecto reafirmante, reparador y altamente hidratante, esta crema está inspirada en el ritual de cuidados de la faraona egipcia. Contiene, como no podía ser de otro modo, leche de burra. Un ingrediente con propiedades antienvejecimiento por su alto contenido en vitamina A (retinol puro) que actúa como tensor natural y regenerador de las células de la piel. Además, está enriquecida con proteínas de seda, manteca de karité, argán, aguacate y almendras. Su aroma de sándalo y vainilla termina de redondear una fórmula de aires exóticos perfecta para el día a día.

Leche corporal con espino amarillo, de Weleda

Las propiedades del omega 7 durante la menopausia están de sobra reconocidas. Su alto poder hidratante es perfecto para cuidar la piel así como para combatir la sequedad de las mucosas. La máxima fuente de este ácido graso es el espino amarillo, ingrediente principal de esta leche fluida nutritiva. De rápida absorción, mantiene la hidratación cutánea hasta 48 horas.

Leche corporal Ultra Firm Skin, de Farma Dorsch

Con vitamina E de origen natural, centella asiática, aceite de almendras… Esta hidratante está diseñada para mantener la piel firme, hidratada y tonificada. No contiene siliconas ni aceites esenciales, es vegana y más de un 98% de sus componentes están certificados como clean ingredientes, tan saludables para la piel como para el medio ambiente.

Leche corporal para menopausia Arkéskin, de Lierac

Formulada con un 93% de ingredientes de origen natural, esta crema de cuerpo está especialmente concebida para corregir los signos visibles de la menopausia sobre la piel: sequedad, pérdida de firmeza y tonicidad. Su textura fundente y nutritiva deja una agradable sensación de frescor inmediatamente tras su aplicación.

Magnesium & Collagen Power, de Glow by Hormone University

Esta loción corporal ultrarrica es perfecta para aplicar por las tardes o noches, ya que además de su efecto hidratante, alivia el estrés y mejora la calidad del sueño. Contiene colágeno y magnesio, mineral más que interesante para añadir a la rutina diaria en menopausia ya que cuida de la salud ósea, cardiovascular e induce al descanso.

Hidratante extra firmeza, de Institut Esthederm

Para combatir la falta de firmeza conviene apostar por activos que estimulen la síntesis y prevengan la degradación de las fibras de colágeno y de elastina. En esta hidratante encontramos una tecnología de última generación con péptidos vegetales centrada en este efecto. También es rica en glicerina, un ingrediente clásico con grandes propiedades hidratantes.

Crema de cuerpo Remodeling, de Sublime Oils

Esta fórmula consigue activar la termogénesis a nivel celular y potenciar así la lipólisis o quema de grasas en zonas como abdomen, piernas, brazos…. Además cuenta con un alto poder drenante, que trabaja sobre la retención de líquidos, y contiene activos reafirmantes. Su aroma balsámico está diseñado para calmar la mente y reducir el estrés.

Cuidado corporal a la alcachofa, de L’Occitane

Esta crema de masaje aprovecha las propiedades drenantes y detoxificantes de la alcachofa. Resulta idónea para mejorar la elasticidad y activar la microcirculación. Su uso está especialmente recomendado ante cambios hormonales que puedan ralentizar la circulación y provocar sensación de piernas cansadas, hinchazón y llevar a la pérdida de firmeza.

Emulsión rejuvenecedora, de Nescens

El laboratorio suizo propone esta emulsión que actúa como un producto dos en uno: exfolia suave y progresivamente al tiempo que restablece los factores naturales de hidratación de la piel. Por tanto, resulta perfecta para cuidar las pieles más secas y con descamación. La clave reside en sus ingredientes. Además de pantenol, niacinamida, urea o glicerina, contiene un polihidroxiácido (PHA) que induce a una exfoliación eficaz, no agresiva y sin irritar la piel.

Crema fortalecedora Ceramide Protect, de Mixa

Uno de los activos más efectivos a la hora de mejorar y reforzar la integridad de la barrera cutánea son las ceramidas. Naturalmente presentes en la piel, estos lípidos actúan a modo de pegamento manteniendo unidas las células y contribuyendo a que la piel sea menos vulnerable a los cambios hormonales. Precisamente son las protagonistas de esta crema para el cuerpo que aporta hidratación, tersura y protección.