Los cinco hábitos para acelerar el metabolismo cada día que debes integrar en tu vida

Son muchas las teorías que giran en torno al metabolismo y cómo puede influir en la velocidad a la que somos capaces de consumir calorías. Pero son muchos los que tratan de acelerarlo sin saber muy bien cómo funciona y en qué podría beneficiarles. Según MedlinePlus, el metabolismo son los procesos físicos y químicos del cuerpo que convierten o usan energía. Entre esos procesos están la respiración, la circulación sanguínea, la regulación de la temperatura corporal, la contracción muscular, la digestión de alimentos y nutrientes, la eliminación de desechos a través de la orina y de las heces y el funcionamiento del cerebro y los nervios.

Lo que hace el metabolismo es transformar los alimentos y las bebidas que consumimos en energía. Esto se hace incluso en reposo, ya que el cuerpo necesita energía para respirar, transportar la sangre a distintas partes, mantener niveladas las hormonas y reproducir y reparar las células. Estas calorías que utiliza el organismo en reposo para mantener las funciones vitales se conoce como tasa metabólica basal o metabolismo basal.

La tasa metabólica basal depende de varios factores, como por ejemplo el tamaño y la composición corporal. Y es que las personas con más masa muscular, queman más calorías, incluso en reposo. Pero también influye el sexo, ya que los hombres tienen menos grasa corporal y más músculo que las mujeres de la misma edad y el mismo peso, por lo que queman más calorías que las mujeres. La edad es otro factor determinante, puesto que al envejecer, las personas pierden masa muscular, por lo que se ralentiza la quema de calorías.

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Hemos consultado la opinión de Laura Llacuna Duran, licenciada en Biología, Doctora en Biomedicina, Coach en Salud y especialista en Psiconeuroinmunología (PNIE) y Nutrición ortomolecular. Según su opinión, el metabolismo sí puede acelerarse, lo que contribuye a una mayor quema de calorías y, por tanto, una pérdida de peso más efectiva. Para conseguirlo, nos da cinco hábitos fáciles de incorporar a tu vida y la razón por la cual son efectivos para acelerar el metabolismo:

1️. Ayuno intermitente

«El tiempo de ayuno debe ser mínimo de 12 horas: si cenas a las 20h, puedes desayunar al día siguiente pasadas las 8h. Es incluso mejor cuando se extiende a 15h o 16h, para que el cuerpo genere más cuerpos cetónicos (suministradores de energía al cerebro), y así quemar más grasas. Será un ayuno más beneficioso de cara a la limpieza celular, la regeneración celular, la limpieza hepática, etc. Este hábito mantendrá a tu organismo desintoxicado y contribuirá directamente en la aceleración del metabolismo, por lo que conseguirás reeducarlo para que vaya ganando mayor flexibilidad metabólica y que, como resultado, funcione cada vez más rápido», aconseja la experta.

Además de para perder peso y reducir el riesgo de enfermedades relacionadas con la obesidad, como la diabetes, la apnea del sueño y algunos tipos de cáncer, el ayuno intermitente tiene otros beneficios, según la clínica Mayo. Algunas investigaciones sugieren que el ayuno intermitente puede ser más beneficioso que otras dietas para reducir la inflamación y mejorar las afecciones asociadas con la inflamación, como el Alzheimer, la artritis, el asma, la esclerosis múltiple y los accidentes cerebrovasculares.

2️. Dieta baja en carbohidratos

«Consiste en reducir el consumo de azúcares que vienen de los cereales, de los tubérculos, de las frutas y de todos los refinados, del azúcar contenido en refrescos, bollería, etc. Si reduces esto, tendrás menos picos de insulina, una hormona que absorbe el azúcar de la sangre, lo conduce a las células y lo convierte en grasa», asegura.

Según MedlinePlus, los carbohidratos son moléculas de azúcar y existen tres tipos diferenciados. Por un lado, los azúcares, también llamados carbohidratos simples porque se encuentran en su forma más básica en alimentos como los dulces o los procesados. Por otro lado están los almidones o carbohidratos complejos, que están hechos de muchos azúcares simples unidos y que necesitan ser descompuestos para usarlos como energía. Los almidones están en el pan, los cereales, la pasta y ciertas verduras, como las patatas o los guisantes.

Y por último tenemos la fibra, que también se trata de un carbohidrato complejo y que no puede ser descompuesta por el cuerpo, por lo que es altamente saciante, puede prevenir problemas intestinales y ayudar a bajar el colesterol y azúcar en la sangre.

3️. Dormir bien

«Es fundamental para tu salud y para favorecer la bajada de peso. Dormir bien ayuda a tener las hormonas equilibradas: hormonas como la grelina y leptina, que trabajan en conjunto aun teniendo funciones opuestas, (la grelina despierta la sensación de apetito, la leptina inhibe las ganas de comer). Tener estas dos hormonas equilibradas impedirá que arrases la nevera y que tengas ansiedad», afirma la biomédica.

Según una investigación realizada por expertos de la Universidad de Chicago dormir durante un tiempo prolongado con descanso pleno supone una mayor pérdida de grasa. Según las conclusiones de este estudio, si reducimos en 3 horas la duración del sueño (de ocho horas y media a cinco y media), el peso que se pierde es equivalente, pero tan solo se queman la mitad de grasas.

4️. Hacer ejercicio

«Hacer ejercicio es importante, sea cual sea tu objetivo o proceso de pérdida de peso que estés llevando a cabo, pero también lo es para tu metabolismo. El ejercicio promueve la quema de grasa, lo que a fin de cuentas supone una ayuda extra para el metabolismo, dándole impulso y logrando que funcione de manera más acelerada», nos ha asegurado.

Como hemos explicado al comienzo de este artículo, las personas con un mayor porcentaje de masa muscular queman más calorías incluso en reposo, por lo que el entrenamiento de fuerza puede convertirse en un gran aliado a la hora de acelerar el metabolismo.

5️. Cuidar la flora intestinal

«Las bacterias intestinales nos dan señales de si está funcionando bien o no, por ejemplo, con síntomas de inflamación o ganas de comer ciertos alimentos, o si procesamos los alimentos de mejor o de peor manera. Tener una flora intestinal cuidada te ayudará a procesar los azúcares, las grasas y tu alimentación mucho mejor, y por lo tanto, a que tu metabolismo funcione más rápido», concluye la experta.

Un grupo de investigadores del Boston Children’s Hospital y del Departamento de Microbiología e Inmunobiología de la Escuela Médica de Harvard han relacionado una buena microbiota con una respuesta positiva de ciertas células intestinales, llamadas enteroendocrinas. Esta reacción a la microbiota por parte de estas células puede acelerar el metabolismo, ajustándolo a nuestra dieta y a las condiciones intestinales.