La farmacéutica Marta Masi, la nutricionista Marta Marcè y la emprendedora Patricia Paredes llegaron a esta etapa antes de lo previsto. Nos cuentan cómo lo vivieron; sus miedos, síntomas... ¡y soluciones!
El síntoma más reconocible de esta etapa se puede volver insoportable durante los meses de calor. Introducir avena integral en la dieta contribuye a combatirlo de forma saludable y sencilla.
La suplementación puede convertirse en una gran herramienta para el 85% de las mujeres que por miedo, desconocimiento o porque no cumplen con los requisitos no reciben tratamiento en esta etapa.
Su déficit es frecuente, especialmente con los cambios hormonales, ya que este mineral interviene en más 300 reacciones bioquímicas del cuerpo. Dar con una buena suplementación resulta fundamental.
Los tratamientos corporales de última generación, que ayudan a ganar masa muscular y perder grasa en tiempo récord, se convierten en el complemento perfecto de la dieta y el ejercicio de fuerza.
La edad y la influencia de los cambios hormonales son los responsables de que, a partir de los 40, empieces a metabolizar peor el alcohol.
Ni contar calorías ni tomarse solo un yogur para terminar el día. Para que la alimentación ayude a transitar por esta etapa debe ser variada, de muchos colores y contener todos los nutrientes.
Flacidez, sequedad, manchas, congestión... La piel no se libra de los efectos de los cambios hormonales. Por eso resulta esencial adaptar la rutina cosmética a los nuevos problemas que aparezcan.
Alimentación, deseo sexual, hormonas y hasta anécdotas de lo más sorprendentes. En plena Feria del Libro de Madrid, te recomendamos los títulos que te permitirán aprender sobre esta etapa.
Cansancio, mala memoria, insomnio... La fatiga mental en la menopausia es un síntoma frecuente, pero ignorado. Saber reconocerlo es clave.
Con la llegada de esta etapa pueden acelerarse los problemas en este grupo muscular. Realizar una valoración regular, fortalecer la zona y practicar ejercicio es clave para mantenerlo en forma.