La ingesta excesiva de proteína no garantiza el aumento de masa muscular y puede originar problemas cardiovasculares, digestivos y renales.
Según una investigación llevada a cabo en la Universidad de Limerick, un paseo corto después de la comida ayuda a reducir los niveles de azúcar en sangre.
Hemos hablado con un experto para confirmar si la técnica desarrollada por el doctor Toshiki Fukutsudzi, para la que sólo necesitarás cinco minutos y una toalla, realmente funciona.
Limpiar tanto el smartwatch como la piel de la muñeca tras cada sesión de ejercicio te ayudará a evitar la aparición de molestos eczemas cutáneos.
Las endorfinas no son las únicas responsables de que te sientas bien al hacer ejercicio. También las mioquinas juegan un papel en ese bienestar, y además mejoran la memoria, el aprendizaje y la depresión.
La obsesión por las redes sociales y, en las mujeres, por tener un trasero tonificado y más piernas podría ser la causa.
Salir a correr o caminar, levantar pesas y hacer yoga te ayudarán a disfrutar de ese sueño de calidad que tanto necesitas.
Correr a un ritmo lento reduce el riesgo de lesiones, aumenta la capacidad aeróbica en mayor medida e, incluso, se asocia a una mayor pérdida de peso.
El aleteo de piernas te ayudará a quemar la grasa abdominal y reemplazarla por músculo, con lo que mejorarás tu equilibrio, estabilidad y movilidad.
Además de descansar, necesitas comer bien, beber agua o una ducha fría son algunos requisitos para tener vitalidad.
La reducción de la estatura, de hasta un centímetro por década a partir de los 40, puede evitarse con una alimentación saludable y la práctica de ejercicio.